Demetrio Sánchez, peregrino de Alcorcón, acude a la audiencia papal y comenzará tres meses de camino de Roma a Santiago

Demetrio Sánchez

El vecino de Alcorcón y voluntario del Banco de Alimentos y jubilados desde hace nueve años, Demetrio Sánchez Chamorro, acude hoy a la audiencia papal para iniciar su gran sueño: realizar el Camino desde Roma a Santiago.

Demetrio Sánchez nació en Cantalapiedra, Salamanca y se mudó a Alcorcón en 1976, donde se dedicó a conducir camiones por las rutas de España, desde los dieciocho años. Con su jubilación le llegó una segunda vida y quiso saber si con su pasado de haber corrido carreras y maratones, podría hacer el Camino de Santiago.

Aunque de entrada lo veía muy difícil, al final se arriesgó: “Empecé por el camino francés, desde San Juan Pie de Puerto y tras novecientos kilómetros y treinta y un día andando llegué a Finisterre”. Desde entonces ha recorrido el camino Norte, el Lebaniego, el Catalán, el que comienza en Lisboa, la Vía de la Plata, el Camino del Cid… y un larguísimo etcétera en los que invierte más de treinta días para recorrer más de mil kilómetros.

Aunque los caminos los emprende él solo, siempre encuentra compañía y va tejiendo una red de amistad y apoyo en la que eso si, se ha ganado un apodo por el que es conocido y que resulta fácil de imaginar: “el Yayo”. Su mayor aliciente es compartir tiempo con la Natura porque “física y espiritualmente la soledad es muy necesaria”, afirma.

Con estos antecedentes, se decidió este año a realizar su mayor reto con un itinerario por delante de casi tres mil kilómetros y cien días de camino. Hoy saldrá de la plaza de San Pedro en Roma con su borzón y una mochila de doce kilos a la espalda en la que no faltará el saco de dormir, la crema de protección solar y unas zapatillas de recambio.

La mochila porta además la imprescindible vieira personalizada, una cinta con la medalla de la virgen de El Pilar, la cinta del pelo de una amiga, el unicornio de otra, monedas y la Cruz de Santiago. La vía
Franciscana le llevará a las ciudades italianas de Luca y Siena, para llegar a las francesas Marsella y Montpelier y pasar a España por Somport y atravesar Navarra para enfilar hacia Santiago. Este año el Camino se lo dedica a su amigo Elidio Trapiello, “un querido y gran peregrino hospitalero”, dice, “una de tantas personas buenas y especiales que encuentras en el Camino”.