El 19 de mayo, el Día Mundial de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal

Día Mundial de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal

Cerca del 1% de la población española tiene enfermedad inflamatoria intestinal

La Confederación de asociaciones de enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa de España aprovecha los días europeo y mundial de la enfermedad inflamatoria intestinal para anunciar que en España, alrededor de 360.000 personas padecen esta dolencia, lo cual supone cerca de un 1% de la población. Suele afectar en gran mayoría a personas con edades comprendidas entre los 15 y los 40 años y se da por igual en hombres que en mujeres. 

La enfermedad inflamatoria intestinal, conocida como EII, es una patología crónica cuyo origen es incierto, y se caracteriza por provocar inflamación y lesiones en el tracto gastro-intestinal. Además de esto, también se producen complicaciones muscoesqueléticas, cutáneas, oculares y complicaciones tromboembólicas. Aunque estas últimas dolencias no las sufren todos los pacientes en su totalidad, sino una minoría.

De todos modos, algunos estudios establecen una relación que demostraría que las personas que sufren esta dolencia tienen una mayor probabilidad de padecer cáncer colorrectal si se compara con el resto de la población.

¿Cuál es su diagnóstico?

En el día a día, esta patología tiene consecuencias en el bienestar de las personas que lo sufren, debido a que la calidad de vida de estos empeora. En otras investigaciones se ha podido ratificar que el 54% de las personas entrevistadas han manifestado que sienten fatiga y cansancio con mucha frecuencia. Asimismo, el 60% padece dolor abdominal.

La Confederación ACCU España de Crohn y colitis ulcera explica que estudios europeos  han revelado que cerca del 45% de los nuevos casos de EII tarda más de un año en recibir un diagnóstico definitivo y que en el 17% del total de pacientes el periodo es superior a 5 años.

¿Cuál es el tratamiento?

En la actualidad no existe ninguna cura para la enfermedad inflamatoria intestinal, pero su patología se puede tratar con los tratamientos disponibles. Lo importante es controlar la enfermedad para favorecer la remisión y ayudar a paliar las complicaciones. 

Además, es aconsejable seguir una dieta saludable y equilibrada, lo cual es básico para mantener una vida saludable. Las personas con dicha enfermedad deben prestar especial atención a la alimentación para evitar problemas de desnutrición y deshidratación.