Vila-real (Castellón), 30 nov (EFE).- El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral, se mostró este jueves autocrítico, a pesar del triunfo ante Panathinaikos y la clasificación para la siguiente ronda de la Liga Europa, al lamentar que su equipo, en la segunda parte, haya puesto en peligro “una victoria clara”.
“Teníamos el partido controlado con 3-0 y un penalti evitable lo ha cambiado todo”, dijo el asturiano a la conclusión del partido en declaraciones a Movistar+.
Marcelino se mostró especialmente contrariado por el segundo gol del conjunto griego en una acción que calificó como “previsible”.
“Me cabrea mucho porque es un pase a la espalda que debemos evitar”, explicó el técnico, quien reconoció que los problemas defensivos son el primer aspecto que debe mejorar el Villarreal si quiere mejorar en todas las competiciones.
“Cuando llegamos aquí sabíamos los números y está claro que toda mejora o parte de ella pasa por ser eficaces en defensa. Los números no son buenos, ni en goles ni en ocasiones concedidas”, reiteró el asturiano, quien recordó que hasta el 3-1 su equipo apenas había sufrido.
“Ha habido desajustes que son fáciles de controlar. Hay que mirar qué hacemos mal para corregirlo y evitar estas situaciones”, aseguró el entrenador, quien explicó que el repunte del equipo, que ha ganado los tres partidos disputados bajo su dirección, no obedece a un único remedio.
“Ha sido una mezcla de todo, de recoger información y de aceptar de común acuerdo una idea de jugar que les resulte familiar y les aporte seguridad”, detalló el preparador, quien agradeció el recibimiento del vestuario y su predisposición al trabajo.