
Madrid, 11 may (EFE).- A partir de esta medianoche quedará abierto al tráfico el primero de los tres pasos inferiores de las obras de remodelación del Nudo Norte, que permitirá la conexión directa del tráfico rodado entre el paseo de la Castellana con la M-30 con destino a la A-1 (la carretera de Burgos) y a la M-11 (que lleva a los recintos feriales).
Así lo ha anunciado este miércoles el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en un acto en el que ha estado acompañado por el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y en el que ha recordado que este será la segunda fase abierta del Nudo Norte, cuyas obras culminarán a lo largo del último trimestre del año tras una inversión de 42 millones de euros.
“Ya está hecha la incorporación desde la carretera de Colmenar (M-607) hasta plaza de Castilla, y ahora abrimos este túnel, que va a permitir que todos aquellos que quieran circular en sentido M-11, así como A-1, puedan hacerlo. El siguiente paso será el 27 de mayo”, cuando “definitivamente en superficie podrán ya circular todos aquellos que quieran dirigirse hacia la M-30 sin la necesidad de tener que cruzar ningún trenzado”, ha abundado el regidor.
Así pues, a partir del 27 de mayo “quedarán ya únicamente solo dos accesos que haya que ejecutar, tanto lo que es desde la M-11 hasta la M-601, así como desde el paseo de la Castellana hasta la M-601”.
Almeida, que ha celebrado que se están «cumpliendo los plazos” y ha agradecido a la empresa adjudicataria (FCC) que así sea porque “no son tiempos fáciles para la ejecución de plazos debido a la dificultad de suministros”, y ha querido también dar las gracias a los madrileños por la “comprensión y generosidad” que demuestran cuando se acometen obras de estas características.
ABRE EL PRIMERO DE LOS TRES PASOS INFERIORES
Fue en febrero cuando se abrió el viaducto superior, que conecta directamente la M-607 con el paseo de la Castellana, mientras que el trazado que se pondrá esta noche en servicio es el primero de los tres pasos inferiores que discurrirán a distinto nivel.
En concreto, este nuevo paso tramo eliminará el trenzado para los vehículos que se dirigen a la carretera de Burgos y la M-11, los que discurren por la M-607/M-30 entre el Nudo Norte y Nudo de Manoteras y que se dirigen a la A-1 o continúan su trayecto hacia del sur de la M-30.
El Ayuntamiento detalla en un comunicado que con esta actuación se elimina un importante punto negro del viario municipal, aliviando la congestión de tráfico que se produce, fundamentalmente, a la hora punta de la mañana y de la tarde, en la salida de la ciudad por la Castellana.
Además, los vehículos que circulen por la M-30 desde la avenida de la Ilustración se verán beneficiados por el nuevo viario, ya que podrán continuar circulando por los carriles en superficie sin ninguna interferencia en superficie.
Está previsto que para verano se adecúen todos los carriles de la M-30 en este sentido a su posición definitiva.
La apertura de este paso inferior se utilizará inicialmente durante esta fase de las obras para albergar los carriles provisiones hasta que hayan culminado los trabajos
CARACTERÍSTICAS DE LA VÍA
El nuevo paso inferior tiene 240 metros de longitud y una anchura de 7 metros, dividido en dos carriles de circulación de 3,50 metros de anchura cada uno. Ambos cuentan con una acera de 0,5 metros a cada lado. En torno a la mitad del desarrollo, la estructura se amplía por su margen derecho para albergar, en una fase posterior, un carril de incorporación hacia el futuro Distrito Castellana Norte desde la prolongación de Agustín de Foxá y Mauricio Legendre.
Ha sido necesario excavar hasta 8 metros de profundidad para ejecutar el paso inferior. En relación con la pantalla, es discontinua y se ha formado por pilotes de 0,80 metros de diámetro con separación de 1,60 metros entre ejes, es decir 2 diámetros, lo que supone un hito de ingeniería civil en este tipo de pantallas en la capital.
La reforma del Nudo Norte es una actuación ejecutada por el Ayuntamiento de Madrid que tiene como objetivo eliminar la congestión de tráfico de esa zona, que soporta la circulación de 34.000 vehículos diarios en hora punta de la mañana y 33.800 en la franja de tarde.
Se prevé que la remodelación ahorre un tiempo en hora punta del 31 % en los desplazamientos de vehículos privados, lo que supone un total de 3.667 horas al día.
Asimismo, el aumento de capacidad en los puntos críticos y la supresión de los cruces supondrá reducir los niveles de congestión por debajo del 70 %.