Toledo, 25 oct (EFE).- La Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía ha reclamado que se actúe con «prudencia» con los trasvases al Levante, porque los pantanos de la cabecera están en «una situación muy delicada», y ha abogado por que cambien las reglas de explotación del Acueducto Tajo-Segura.
En una nota de prensa, la asociación ha advertido que el trasvase de 18 hectómetros para octubre que ha aprobado este miércoles el Gobierno llega con los embalses de Entrepeñas y Buendía «en situación muy delicada», tras un año hidrológico que acaba de terminar que ha estado marcado por el descenso de las aportaciones en la cabecera.
Atendiendo a esta situación, los municipios ribereños han hecho un llamamiento a la «prudencia» en la autorización de trasvases, ya que está habiendo un progresivo descenso de las aportaciones a la cabecera del Tajo, año a año, «que vaticina un futuro todavía más difícil para el río».
Asimismo, han apuntado que como el abastecimiento humano está garantizado para varios meses en la cuenca del Segura con 35,6 hectómetros cúbicos en reserva, es necesario que se readapte la demanda en la zona levantina a la realidad «para garantizar el uso prioritario del agua para consumo humano frente a los usos comerciales y consuntivos de la agroindustria”.
En este sentido, el presidente de la Asociación de Municipios Ribereños, Borja Castro, ha considerado que es urgente el cambio de las reglas de explotación del Acueducto Tajo-Segura «no solo para cumplir con los caudales ecológicos», también para adaptarse «a un nuevo escenario en el que los procesos se están acelerando a un ritmo que no entiende de tiempos políticos».
Castro ha criticado que mientras Entrepeñas y Buendía apenas están recibiendo aportaciones y el ciclo húmedo no se ha notado en la cabecera, el Tajo «continúa desangrándose camino del Segura».
Según el presidente de la asociación de los pueblos ribereños: «Cada vez llueve menos, es un hecho que venimos constatando desde 2010», por lo que en su opinión «los volúmenes de envío no pueden ser los mismos que a principios de siglo, sencillamente no es sostenible».
Este año han entrado en Entrepeñas y Buendía aproximadamente unos 643,7 hectómetros cúbicos frente a los 736 hectómetros cúbicos que han llegado a los pantanos de media en los últimos 30 años, ha indicado Castro, que ha añadido: «Son 100 hectómetros cúbicos menos, una cifra lo suficientemente considerable como para no ser tenida en cuenta».
A su juicio, «es imprescindible que el Segura reduzca su demanda, porque el Tajo no va a ser capaz de sostenerla, independientemente de la voluntad política del partido que esté en el Gobierno», porque con el envío aprobado este miércoles «los embalses quedan condenados a nivel 3 hasta finales del invierno, dependiendo de las precipitaciones», según las previsiones del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX).