Ucrania inició en los últimos días una fuerte contraofensiva en el noreste del país. Para ello, los avances tecnológicos han sido el mayor aliado del ejercito ucraniano
Zelenski informó en su último discurso el pasado lunes que Ucrania ha recuperado hasta 6.000 km² en el este y el sur. Además, confirma que se ha podido liberar a más de una treintena de localidades. Gracias a la ayuda brindada por EE.UU. y Europa, el ejercito ucraniano cuenta con un importante equipamiento armamentístico. De entre los suministros bélicos que Ucrania está recibiendo, destacan los drones y otros vehículos no tripulados.
Tanto Ucrania como Rusia han utilizado drones desde el comienzo del conflicto. Los principales usos de los drones han sido observar los movimientos del ejército contrario, guiar la artillería y prevenir ataques. No obstante, el ejercito ucraniano los está utilizando también como kamikazes. Cargados de explosivos, se estrellan contra los rivales para conseguir el mayor número de daños posibles. El objetivo es ralentizar o detener el avance de las tropas rusas y destruir depósitos de suministros. De hecho, el grupo ucraniano Kalush Orchestra, ganador del Festival de Eurovisión, donó su trofeo por US$900.000. Cantidad que se destinó para la compra de drones.
La apuesta de Ucrania por el dispositivo de drones, tanto militares como comerciales, les ha permitido detectar posiciones del ejercito contrario y disparar artillería con gran nivel de precisión. El dron militar que más está utilizando Ucrania es de fabricación turca, el Bayraktar TB2, del tamaño de un avión pequeño. Por su parte, Rusia está comprando drones Shahid a Irán, según informaba la Casa Blanca el pasado julio.
No obstante, Rusia todavía controla una quinta parte de Ucrania. Si es cierto que, las sanciones impuestas desde la invasión de Crimea en 2014 han hecho que conseguir repuestos y equipamiento de avanzada tecnología militar sea más difícil para el país liderado por Putin. Sin embargo, Rusia tiene mayor potencial bélico que Ucrania.
Estará por ver si el final de la guerra llega pronto, tras esta contraofensiva “relámpago” por parte de Ucrania, o aún queda la respuesta por parte de Rusia, que todavía no ha desplegado toda su capacidad militar convencional.
