Un cuadro que iba ser subastado en Madrid por 1.500 euros ha sido retenido por el Ministerio de Cultura y Deporta al poder ser un original del Caravaggio
La historia es, desde luego, de novela literaria. En apariencia, el lote 229 era uno más de los muchos cuadros que se iban a subastar en la casa Ansorena de Madrid este pasado jueves 7 de marzo. El cuadro en cuestión era un óleo sobre lienzo de 111 x 86 centímetros titulado La Coronación de espinas o Ecce Homo, aún por especificar, y se atribuía al círculo de José de Ribera en torno al siglo XVII. Y, aunque muchos expertos han coincidido a posteriori en que la calidad de la obra era mayor, al principio apenas estaba tasado en 1.500 euros, una auténtica ganga para cualquier comprador.
Las alarmas saltaron cuando empezaron a conocerse pujas de muy alto valor por el cuadro. Un anticuario español ofreció un millón de euros. Un consorcio de otros ingleses y holandeses y uno más de italianos muestran su interés, llegando a haber una puja por 20 millones de euros. Además, se descubre que María Cristina Terzaghi, experta en Caravaggio, ha sido enviada por los anticuarios Robilant-Voena y Moretti para estudiar la pieza en la casa de subastas Ansorena y se filtra que, tras el estudio llevado a cabo por la experta, la teoría de que podía ser un Caravaggio podría ser verdad.
La noticia se hizo eco entonces en varios periódicos italianos. Y, ante la posible venta, todo el mundo se puso en guardia y la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio y la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes se reunió de urgencia para declarar el cuadro como inexportable. El Ministerio de Cultura, tras la reunión, actuó para bloquear la subasta de un posible Caravaggio que podía salir del país, violando así la ley de patrimonio. Así lo confirmó ayer el ministro de Cultura y Deporte José Manuel Rodríguez Uribes.
La Comunidad de Madrid además ha iniciado a instancias del Ministerio la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) del cuadro. “Con esa doble garantía nos aseguramos que se quede en España y que se puedan hacer las cosas bien”, ha explicado Rodríguez Uribes.
Según Vittorio Sgarbi, experto en Caravaggio, el cuadro, si se confirma que es original, podía costar “lo que se quisiese, entre 100 y 150 millones de euros, si se lo vende a un inversor privado o de 40 a 50 millones si se lo vende al Museo del Prado”.