El portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, ha criticado las acciones del alcalde José Luis Sanz, acusándolo de adoptar el ideario de VOX al descargar el presupuesto municipal de políticas relacionadas con la cultura, igualdad, lucha contra el cambio climático, Memoria Democrática y programas sociales
Muñoz ha señalado que Sanz está alineando su política con las posiciones de VOX, y ha cuestionado si esto significa negar el cambio climático y la violencia de género, desatender la cultura y la Memoria Democrática, y reducir los programas sociales. Ha planteado que Sanz debe elegir entre acordar un presupuesto municipal con VOX que implique un retroceso en cuestiones de igualdad, medio ambiente, cultura, Memoria Democrática y progreso social, o buscar el apoyo del PSOE para continuar con la dinámica de los últimos años, donde se han priorizado los intereses generales sobre los partidistas.
El portavoz socialista ha acusado a Sanz de pertenecer al ala más dura del PP y de estar erosionando la moderación política que ha existido en Sevilla en los últimos años. Ha destacado que Sanz ha estado 100 días sin gobernar, lo que significa que Sevilla ha estado sin alcalde durante ese tiempo.
Muñoz también ha criticado el balance que Sanz ha hecho de sus primeros 100 días de mandato, argumentando que carece de un modelo de ciudad y se guía por la improvisación y la rectificación. Ha afirmado que Sanz ha utilizado argumentos inconsistentes para justificar sus acciones y ha intentado atribuirse logros que en realidad son el resultado del trabajo previo de otros gobiernos. Además, ha acusado a Sanz de mentir en varios aspectos, incluyendo la estabilización de contratos en Lipasam y otras cuestiones.
El portavoz del PSOE ha concluido que Sanz no tiene un modelo claro para gobernar Sevilla y que su gobierno carece de dirección. Ha enfatizado que la improvisación y la rectificación han sido las características principales de su mandato hasta ahora y que su obsesión por deshacer proyectos de gobiernos anteriores está costando a la ciudad 70.000 euros al día.
