El PSOE pone rumbo a las elecciones con Madrid y Valencia como grandes retos

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, da un discurso durante la reunión del Consejo Político Federal del PSOE, el pasado sábado 17 de septiembre en Zaragoza. EFE/ Javier Belver

Madrid, 19 sep (EFE).- El presidente castellano-manchego, Emiliano García-Page, ha dicho este lunes que sus opiniones, como la de que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, no es un «insolvente», «son personales» y ha avisado a quienes quieran atacarle por ello: «Sinceramente, que no me busquen».

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en rueda de prensa tras reunirse este lunes, en Madrid, con la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez Jiménez para tratar diversos asuntos de interés regional que competen a este Ministerio. EFE/ Fernando Alvarado

En una rueda de prensa tras firmar en Madrid un protocolo de colaboración con la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, el presidente de Castilla-La Mancha se ha reafirmado en las palabras que recoge en ese sentido una entrevista con el diario «El Mundo» y que hoy mismo han sido agradecidas por el propio Núñez Feijóo.

«Yo he hecho acuerdos con el señor Feijóo y cuando lo he hecho, era sobre la base de que me parecía solvente poder firmar con él», ha dicho esta mañana García-Page, que ha añadido: «Lo que sí tengo muy claro es quiénes son los insolventes, que son los que buscan romper lo que es el interés general».

Aunque ha comentado que, en el acto celebrado este sábado en Zaragoza en el que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunió con los barones socialistas, pudo dar esta opinión en los veintitantos segundos que tuvo para ello, ha asegurado además que ya «antes» se lo dijo «a quien tenía que saberlo».

Hoy, en respuesta a los medios de comunicación, García-Page ha subrayado varios mensajes: «Mis opiniones son mías y no vinculo a nadie, ni siquiera al PSOE de Castilla-La Mancha»; «Mi coherencia conmigo mismo realmente es lo que expongo para pedir la confianza de la ciudadanía» y «Yo juzgo a las personas, me da igual si representan al PP».

Ha manifestado también que lo que defiende es «un proyecto mayoritario» e intentar no llegar a las elecciones «ofreciendo repetir el puzle», en referencia al pacto de gobierno y los apoyos parlamentarios, ya que lo «lógico» y «evidente» a su juicio es que todos los partidos deben tratar de obtener una mayoría suficiente para gobernar.

En todo caso, ha garantizado que «no hay guerra ninguna» con la dirección socialista: «Yo cierro filas con mi partido, lo cual no me va a llevar nunca ni a insultar ni a decir lo que no pienso».

En la entrevista con «El Mundo», García-Page dice del presidente del PP que ve «muy difícil que la sociedad española vea como insolvente a alguien que ha sido avalado no sólo por las urnas sino que desde Galicia ha mantenido un tipo de relación institucional con este Gobierno más que razonable en los últimos años».

«No comparto ni me identifico con ese apelativo de insolvente, ni creo que sea acertado», ha agregado, además de argumentar que «los gobiernos no pueden buscar el papel de víctima» y avisar a su partido de que si sigue «con las mismas compañías», en alusión a los socios parlamentarios, «es evidente que va a haber un castigo» electoral.

Esta mañana, tras presentar en un desayuno informativo al presidente andaluz, Juanma Moreno, el líder del PP ha agradecido las palabras de García-Page y ha comentado que el presidente castellano-manchego, «sabe mucho de esto».