Javier Cercas: Publicar artículos en prensa cambió mi manera de escribir

Barcelona, 28 feb (EFE).- El escritor Javier Cercas, que ha reunido veinte años de textos publicados en prensa y conferencias en su último libro, «No callar», ha confesado este martes que redactar estos artículos para la prensa «cambió mi manera de escribir».

En la presentación de «No callar» (Tusquets), Cercas ha dicho que, por ejemplo, «las crónicas de ‘El País’ fueron el laboratorio de ‘Soldados de Salamina'» y ha recordado que «en ‘Soldados’ el narrador dice que es un relato real, lo cual no quiere decir que lo sea».

Cercas (Ibahernando, Cáceres, 1962) reconoce que «antes de las crónicas en prensa era un escritor de gabinete, un escritor encerrado», y aunque ahora lo sigue siendo, esas crónicas le obligaron a hacer cosas que nunca había hecho y transformaron su manera de escribir: «Lo primero fue salir a la calle; y también decir cosas lo más complejas posible de la manera más clara posible, sin que la claridad sea sinónimo de simpleza».

Los mejores prosistas españoles de los últimos dos siglos, anota Cercas, escribieron en la prensa, algo que no pasa en Francia, ni en Reino Unido ni en Estados Unidos, y esto tiene que ver con nuestra historia, y cita ejemplos como «Luis García Cañuelo, el Censor, en el siglo XVIII; Larra, quizás el mejor, en el siglo XIX; y Azorín, Ortega, Unamuno, Josep Pla, Xammar, Sagarra y después de la guerra Joan Fuster, Gaziel», en el XX.

En el volumen, el autor aborda desde los asuntos del momento histórico reciente (populismos, posverdad y falsas noticias, construcción del relato, capitalismo de la vigilancia, amenazas a la democracia, nuevos autoritarismos) hasta su repercusión en el ámbito español (relectura de la Transición y la Guerra Civil, desorientación de las izquierdas, desprestigio de las instituciones, partitocracia, falta de consensos) y las manifestaciones locales de todo ello, como el secesionismo catalán

Cercas, que no quería elaborar «un almacén de textos», deseaba dotar al volumen de «coherencia», y por esa razón siempre se había resistido a una recopilación de textos -la última data de 2005.

Asume que en el libro se repiten algunos temas como «la Guerra Civil española, que no duró tres años, sino 43, porque el franquismo no fue la paz sino la prolongación de la guerra por otros medios».

En otros artículos subyace su idea de que «Europa es la única utopía posible y razonable» y, en otro capítulo, desfilan varios retratos de escritores, artistas, deportistas, cineastas o músicos abordados con humor.

En el texto recurre solo a un orden cronológico en el capítulo final autobiográfico, «Cuanto sé de mí», la mayoría textos humorísticos; y en el dedicado al procés de Cataluña, en el que le interesaba que estuviese «la experiencia de un catalán que ha vivido estos años y cómo ha ido evolucionando a lo largo del tiempo, desde la perplejidad de los primeros artículos, porque nunca creí en 2012 que llegaríamos a donde llegamos en 2017».

A pesar de que le han dado en su trayectoria muchos premios periodísticos, Cercas se siente «un impostor, porque nunca he sido periodista» y, como mucho, es «un espécimen frecuente, un escritor que escribe en la prensa», quien, como decía Oscar Wilde, «‘paso el día trabajando, por la mañana quito una coma y por la tarde la vuelvo a poner’, y eso no es periodismo».

A su juicio, «un periodista es alguien que va a la batalla de Waterloo y cuenta lo que está pasando, y el escritor llega cuando la batalla se ha acabado y se empiezan a contar los muertos, los heridos y por qué ha pasado; es otra cosa, es mucho más cómodo».

Antes de 2008 Cercas apenas escribía de política y empezó después de la crisis económica, lo mismo que les pasó a los poetas y escritores después de la crisis de 1929, que acabaría desembocando en los totalitarismos que llevaron a la II Guerra Mundial.

«La crisis de 2008 desembocó en los nacionalpopulismos y Putin es la cara visible de ese nacionalpopulismo occidental, detrás del cual está China; y por esa razón Putin ha apoyado todas las grandes y pequeñas manifestaciones nacionalpopulistas, desde Trump al brexit, o al independentismo catalán».

Sobre 2020, Cercas cree que «las pandemias no tienen quien las escriba», y prueba de ello, añade, es que de la gripe de 1918 apenas se habló en la literatura, «se olvidan, a pesar de que matan a más gente que las guerras mundiales».

Preguntado por su fórmula para escribir los artículos de prensa, el autor de «Anatomía de un instante» revela que muchos de ellos los piensa mientras está corriendo.

Para él, «un artículo se parece a un poema» y de ahí surge una «manía», que siempre tengan los mismos caracteres, 4.200, y tres párrafos».

La gran ventaja es que estos artículos se publican cada dos semanas y encima son entregados con dos semanas de antelación, «lo que te permite no estar pegado a la actualidad total», con la única excepción de uno que salió el mismo día que comenzó la invasión rusa de Ucrania.