Las compras por internet marcan este año las rebajas navideñas, que son más digitales que nunca por la pandemia pero también de las más flojas que se recuerdan, ya que los descuentos han sido constantes desde el «Black Friday» y la situación económica, las restricciones y ahora el temporal no ayudan a las ventas.
Caídas de hasta un 40%
Si desde la Confederación Española del Comercio (CEC) ya advierten de que las de enero de este año serán las peores rebajas de la historia, superando incluso las de 2013 cuando las ventas se redujeron un 25 %, desde la patronal textil Acotex prevén caídas del entorno del 35-40 % con respecto al año anterior.
A las puertas de una tercera ola de la pandemia, y pese al auge del comercio electrónico desde que estallara la crisis sanitaria, la patronal logística UNO ya vaticina una floja campaña de rebajas, en la que no se espera un aumento en el volumen de envíos sino más bien lo contrario, que vayan bajando poco a poco, según reconoce a EFE su presidente, Francisco Aranda.
Según los cálculos de Securitas, el gasto de los españoles durante esta campaña de rebajas será de 230,5 euros, 50 euros inferior que el presupuesto de años anteriores.
El comercio «online», más protagonista que nunca
Pese a todo, el canal «online» está mitigando un poco las caídas. Durante la pandemia llegó a dispararse hasta un 50 %, porcentaje que se redujo al 20 % con el progresivo levantamiento de las restricciones y que se ha mantenido entre un 30-40 % durante el «Black Friday» y la campaña de Navidad.
Este incremento ha marcado la actividad de Correos, que durante noviembre y diciembre ha gestionado más de 34,3 millones de paquetes, el 45 % más, y ha ampliado su capacidad de clasificación en 600.000 paquetes más al día, reforzado las redes de transporte con la apertura de 318 nuevas rutas y renovando su flota de más de 13.000 vehículos.
DHL ha registrado un 35 % de crecimiento del volumen de comercio electrónico en 2020 y por encima del 50 % en temporada alta. La compañía de transporte espera para estas rebajas un crecimiento del 35 % sobre el año pasado, aunque todo dependerá de cómo evolucione la situación, que ha requerido de nuevos sistemas, rutas de reparto adicionales y más personal de nave para atender el incremento de pedidos.
Sending Transporte Urgente, por su parte, también ha incrementado un 40 % el volumen de paquetes movidos y prevé cerrar la campaña navideña con más de 2,5 millones de paquetes movidos. Para hacer frente a este incremento de la actividad, ha reforzado su plantilla con un 30 % más de personal, sus rutas y su capacidad de almacenaje en ubicaciones clave como Madrid y Cataluña.
Y es que, el comportamiento del consumidor ha cambiado de forma súbita, señalan desde UNO. Ha abandonado la fidelidad a las marcas, para pasar a priorizar el producto y la entrega.
Cambian los hábitos de consumo
Aunque una parte del crecimiento «online» ha sido coyuntural dadas las restricciones al movimiento y el avance de la pandemia, una parte importante del crecimiento se mantendrá porque el consumidor se ha vuelto más digital. En sólo unos meses, el consumidor ha madurado su relación con el comercio electrónico («ecommerce»), lo que estaba previsto en cinco años, agrega Aranda.
Por su parte, el especialista en transformación empresarial Marco Táboas cree que los cambios que ha traído el coronavirus en el sector minorista («retail») se quedarán en 2021 y mucho más allá, y pronostica un futuro incierto para las tiendas físicas con pocos puntos en la ciudad ya que los usuarios comprarán básicamente «online». La estrategia de tener miles de establecimientos dejará de tener sentido, apunta.
En un contexto como el actual, la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE) pide apoyar al comercio de proximidad frente al «imperio digital» de las grandes superficies que cada vez se hacen más hueco en las compras de los hogares.
El comercio pide auxilio
El comercio está en una situación dramática y necesita ayudas imperiosas, insisten desde Acotex, que califican de escasas e inocuas las recientes medidas anunciadas por el Gobierno en un momento como el actual.
Por ello, claman por una exoneración de tasas, tributos e impuestos, una bajada del IVA para fomentar el consumo, que estén exentos de las cuotas de la Seguridad Social de los trabajadores que están en ERTE, que se prolonguen estos expedientes temporales como mínimo hasta julio, y que se favorezca la renegociación de los alquileres con los caseros.
«La obligación de mantener la plantilla durante seis meses tras el ERTE por causa de fuerza mayor es absolutamente inviable. No se pueden mantener las plantillas, es más, necesitamos la ayuda del Gobierno y probablemente del Fogasa», subrayan desde la patronal textil.
Pese al desplome del empleo en muchos sectores, Adecco e Infojobs prevén que otros como el comercio electrónico sigan impulsando la economía y reactivando mínimamente el mercado de trabajo.
Fuente: © EFE 2021