Barcelona, 13 sep (EFE).- El base del Barça Tomas Satoransky (Praga, 1991) explicó en una entrevista con EFE que «echa de menos» algunos aspectos de la NBA, pero que «no cambiaría» la decisión que le llevó en el verano de 2022 a regresar al Palau Blaugrana tras seis temporadas en Estados Unidos.
«Hay cosas que echo de menos (de la NBA): competir contra los mejores jugadores cada día, estar en pistas históricas… Solo llevar el logo de la NBA en la camiseta es un privilegio. Lo echo de menos, pero no tanto como para no estar contento aquí», afirmó el internacional checo.
Satoransky considera que Barcelona es su «segunda casa», donde ha encontrado la «seguridad» que necesitaba dentro y fuera de la pista: «No cambiaría nada, estoy supercontento. A mi familia le encanta la ciudad. Tengo dos hijos, de cinco y dos años, que ya van a la escuela y les encanta. Buscábamos tener esta seguridad».
Una estabilidad que contrasta con «el negocio de la NBA», una aspecto que reconoce haberle decepcionado: «Los equipos no son muy fiables en quedarse con los jugadores que fichan. Puedes tener buenos partidos, piensas que ayudas al equipo, y por otras razones no juegas en los siguientes diez encuentros».
«Es la injusticia del negocio, pero tienes que aceptarlo. Si estás ahí formas parte de eso», consideró Satoransky. Con todo, el base señaló el «cansancio» por el «trato» al jugador como «la razón principal» por la que los europeos terminan regresando. «También echamos de menos Europa y queremos acabar en casa jugando un buen baloncesto», completó.
Por último, el checo opinó que ahora los europeos «a veces se van demasiado jóvenes» a la NBA y «sin haberse ganado un sitio en las mejores ligas europeas».
«Cada uno tiene su caso. En el mío, incluso en Euroliga tuve la suerte de ir poco a poco y la experiencia en Barcelona me ayudó en los momentos difíciles ahí, cuando no jugaba. Me gusta que ahora tengan la oportunidad de ir tan jóvenes, pero creo que a veces les cuesta más (hacerse un hueco)», zanjó.