Un grupo de usuarios de Esfera ofrecerá su testimonio ante estudiantes de la Universidad Francisco de Vitoria, invitados por varios alumnos que han realizado prácticas en proyectos de la Fundación. Las personas con diversidad funcional mostrarán su experiencia e impresiones, con el objetivo de desmontar los prejuicios sociales sobre la discapacidad.
Se trata de una actividad vinculada a la asignatura de Responsabilidad Social que se imparte en el segundo curso de carrera, y que consiste en que los alumnos se involucren en algún proyecto para mejorar la sociedad y eliminar barreras. En este caso los estudiantes se han implicado previamente en el área de discapacidad, con la realización de prácticas.
Los universitarios explican que el profesor animó a los diferentes grupos de la clase a exponer su experiencia de voluntariado y a mostrar la realidad que han vivido en los últimos meses. Ante este ofrecimiento, han pensado en miembros de Esfera para que cuenten sus impresiones y expliquen a sus compañeros algunos proyectos destacados en los que participan, como el Club de Ocio, las actividades deportivas o los talleres.
La intención de los universitarios con esta propuesta es demostrar que la sociedad crea prejuicios infundados sobre las personas con diversidad funcional, y esa idea cambia al mantener un trato directo. Desde el área universitaria recuerdan que la finalidad de la asignatura es impulsar entre sus participantes valores como la solidaridad, el respeto y el compromiso con la sociedad.
María Hernández es una de las estudiantes de periodismo y relaciones internacionales que ha realizado voluntariado con usuarios de Esfera y destaca “lo más cautivador es la calidad humana de todos los que integran esta comunidad; la atención de profesores y monitores generan un sentimiento de pertenencia y acogida muy especial”.
También subraya que el voluntariado cambia la vida porque ofrece una mirada más sensible de la realidad. Como futura periodista asegura que quiere “dar visibilidad a estas situaciones para fomentar la inclusión, pero sobre todo, he de compartir mi experiencia con otros para contribuir a la normalización de la discapacidad”. María anima a los demás a implicarse en este tipo de proyectos y destaca que “lo positivo de las personas supera con creces lo negativo”.