La candidata de Vox a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha pedido el voto en las elecciones del 4 de mayo para proteger la región de la izquierda y de «sus políticas que traen ruina», y crear «una sociedad de patriotas», porque hacer patria hoy es «creer en lo común» y es «la mejor manera de oponerse al globalismo»
La candidata de Vox a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha pedido el voto en las elecciones del 4 de mayo para proteger la región de la izquierda y de «sus políticas que traen ruina», y crear «una sociedad de patriotas», porque hacer patria hoy es «creer en lo común» y es «la mejor manera de oponerse al globalismo».
«La patria es el último refugio al que acudir cuando no queda nada, por eso sólo los ricos se pueden permitir el lujo de no tener patria», ha dicho Monasterio en la plaza de Colón, ovacionada por miles de simpatizantes que ondeaban banderas de España, frente a los que ha criticado a «esa izquierda pija que va a Vallecas de turismo, que ha abandonado los barrios, que llama xenófobo al vecino que pide seguridad en las calles», ha continuado.
Y por eso -ha proseguido- «nos insultan, nos tiran piedras, porque saben que somos la voz del sentido común, la que madruga, que es valiente, y que ha dicho ‘hasta aquí hemos llegado'», ha exclamado Monasterio, que asegura estar harta del «adoctrinamiento en las aulas» y de que quieran que los niños sepan «más de genero y afectos sexuales que de matemáticas, lengua e historia».
Las madres y padres, ha sostenido Monasterio, no van a permitir que sean educados por «Pablo Iglesias y los suyos» y por eso les ha pedido que voten para «mandar a Pablo Iglesias a su casa y que le aguante Irene (Montero)» y decirle a Pedro Sánchez que «en Madrid comienza el principio del fin del Gobierno de la ruina y la miseria».
En su intervención ha recordado el debate de la Ser que abandonó el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, después de que Monasterio pusiera en duda la carta amenazante con balas que éste había recibido.
«No nos conocen. Se puso digno diciendo que no condenábamos las amenazas, como si nosotros fuéramos como él, nosotros las habíamos condenado, toda la violencia venga como venga», ha señalado.
Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha dicho que la suya ha sido la campaña «de la ilusión, de la esperanza, de la decencia y de la libertad» frente «a los que sólo han traído resentimiento, odio, censura y trampas», y que va a dejar «un recuerdo imborrable» que «tarde o temprano dará la victoria a Vox en toda la nación».
Ha añadido que el «Gobierno del montaje nos ha tenido diez días hablando de la (campaña) del sainete balístico», en alusión a las cartas amenazantes que recibió Iglesias y otros políticos, y ha insistido en que Vox no sabe si esas cartas «son verdad o mentira».
«Diez días hablando de eso mientras los sicarios que mandaba Iglesias han sido los que nos han agredido y el Gobierno lo sabía y se ha callado, en el mayor acto de corrupción perpetrado desde hace tiempo en unas elecciones en España», ha dicho Abascal refiriéndose a la información sobre los dos empleados de seguridad de Iglesias detenidos por los altercados durante un mitin de Vox en Vallecas.
«Qué buenos frutos nos van a traer las elecciones, por fin alguien que tenga que aguantar al macho alfa y no van a ser los españoles. Ese machito alfa llorón», ha apostillado el líder de Vox, que ha señalado que Iglesias no tiene derecho a quejarse porque «ha traído a España la violencia, los escraches, la batasunización y los insultos».
También ha cargado Abascal contra Más Madrid que, «como Iglesias, tienen la lengua muy larga y la piel muy fina», así como contra el candidato socialista, Ángel Gabilondo, a quien ha llamado «Biden Gabilondo» y que parece «moderadito» pero ya se quitó «la careta».
También contra Pedro Sánchez, que ha señalado que es «el presidente del Gobierno ilegítimo de España» y que ha pactado con los «enemigos de España», y finalmente contra el PP de Pablo Casado, que está «en la equidistancia respecto al Gobierno» y al que ha acusado de ser «la veleta azul».
«Vox es de verdad, es un movimiento social y patriótico auténtico que está llamado a ser la principal fuerza política del país muy pronto», ha asegurado en el mitin, que ha finalizado con fuegos artificiales con los colores de la bandera de España que han iluminado toda la plaza de Colón, con 3.500 personas que han permanecido sentadas en asientos separados y otras tantas que han estado de pie durante el acto, según fuentes de la formación.
Fuente: © EFE 2021