Cornellá de Llobregat (Barcelona), 30 nov (EFE).- El entrenador del Celta, Claudio Giráldez, señaló tras la derrota contra el Espanyol en el RCDE Stadium (3-1) que su equipo tuvo el «control», pero le faltó «profundidad» para concretar su mayor posesión.
El técnico, en rueda de prensa, ha querido dar «valor a dominar todos los partidos fuera de casa», pero no ha escondido que las asignaturas pendientes son claras: «No estamos siendo certeros en situaciones de área o balones divididos».
Giráldez ha afirmado que los fallos que está cometiendo su equipo son «recurrentes» y ha asumido su «responsabilidad». «Cuando fuera de casa volvemos a cometer errores en situaciones de balón parado o directo es complicado puntuar», ha reflexionado.
Por otra parte, el entrenador también ha destacado la constancia de sus futbolistas: «Me quedo con la actitud del equipo de querer, de seguir insistiendo pese a estar 2-0 y de meter al rival atrás dominando todo el partido la posesión».
El preparador ha insistido en que, pese a todo, el equipo debe ser «más ambicioso en el último tercio y cambiar mucho más la velocidad». «Debemos ser más solidarios en ocasiones como el balón parado. Las sensaciones fuera de casa no se corresponden con los puntos», ha añadido.