Barcelona, 31 ene (EFE).- El técnico del Barça, Roger Grimau, calificó calificó como «muy redondo, regular y sólido» el partido de este miércoles frente al Virtus Segafredo Bolonia (84-57), del que también subrayó el «tono físico y energía» de sus jugadores.

«Hemos hecho un partido muy redondo, regular y sólido a todos los niveles. Quizás nos ha costado entrar un poco en el primer cuarto, pero enseguida hemos cogido el tono físico y la energía necesarios para este partido y para este rival», declaró el entrenador catalán.

Desde la sala de prensa del Palau Blaugrana, Grimau elogió la defensa sobre Marco Belinelli, especialmente por parte de Tomas Satoransky, del que destacó su «concentración», «determinación» y demostración de «liderazgo», pues se tomó como «un reto personal» el anular al mejor anotador visitante, que «en ningún momento si metió en el partido».

«Hemos controlado muy bien a Belinelli, que si te mete los dos primeros triples es casi imposible pararlo. Hemos podido controlar sus transiciones. Hemos sufrido un poco en el rebote ofensivo, especialmente en la primera parte. Al final hemos podido romper el partido y encontrar una victoria muy importante para nosotros», reflexionó.

Grimau admitió que se sienten «muy cómodos» en casa y afirmó que «la Euroliga tiene algo que se te impregna cuando suena el himno», pero enfatizó que el equipo tiene que «buscar este nivel en cada partido».

«Hemos sido muy sólidos en defensa y cuando hemos podido controlar el rebote, e incluso tras canasta, hemos podido correr y tener un juego más fluido en ataque. Cuando estás muy bien en defensa, las cosas en ataque suelen salir mejor».

El técnico catalán negó que el Barça tuviera ganas de revancha ante el Virtus Bolonia por la derrota de la primera vuelta y aseguró que el de este miércoles «era un partido importante, pero como los diez que quedan».

«Es una Euroliga muy igualada especialmente en jornadas dobles. En casa nos tenemos que hacer fuertes. En 48 horas jugamos otra vez. Todo cuenta y suma. El partido de hoy, contra un rival con el que estábamos empatados, cobraba una importancia más relevante», completó.

Finalmente, alabó el rendimiento de Nico Laprovittola: «Poco tengo que descubrir de ‘Lapro’. Tiene juego, calidad y magia, pero no tenemos que dejarle solo. Tenemos que contribuir todos. Si el equipo está muy metido atrás, puede salir y encontrar espacios en ataque. Ahí interviene el gran talento de los jugadores. Los días en los que está inspirado, es difícil defenderlo».

Por su parte, el entrenador del Virtus Segafredo Bolonia, Luca Banchi, lamentó la falta de «físico», «consistencia» y «constancia» de sus jugadores, que imposibilitó «cubrir las entradas a canasta y los tiros exteriores» de un Barça que «ha impuesto su agresividad». «Hoy ha sido un partido de dureza y el Barça ha sido más duro», resumió.