El Presupuesto Municipal para 2017 ha quedado aprobado automáticamente al no haberse presentado alegaciones por parte de ningún grupo
El Pleno de la Corporación municipal ha aprobado hoy, de manera definitiva, las ordenanzas fiscales para el próximo año con los votos a favor de PSOE e IU, la abstención de Ganar Fuenlabrada y los votos en contra de PP y Ciudadanos. Han quedado desestimadas así las alegaciones presentadas por PP y Ciudadanos.
La concejala de Hacienda Raquel López ha explicado que los Presupuestos 2017 contemplan, un año más, contención de la presión fiscal a los vecinos, garantizando siempre los ingresos suficientes para la prestación de los servicios públicos y las políticas sociales.
Por cuarto año consecutivo el Ayuntamiento reducirá el tipo impositivo que le corresponde aplicar al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para amortiguar así el incremento que se produce por la actualización de la ponencia de valores.
Para el año 2017 la reducción será del 0,20 por ciento. Se trata de una reducción acumulada en estos cuatro años de casi el 15 por ciento. Además el Gobierno municipal ha solicitado la aplicación de un coeficiente reductor en los valores catastrales con el objeto de mitigar en todo lo posible la presión fiscal a las familias fuenlabreñas.
La edil ha destacado el esfuerzo que realiza el Gobierno municipal a favor del contribuyente en materia fiscal, “ya que en los últimos cuatro años las arcas municipales han dejado de percibir 17 millones de euros por la aplicación del coeficiente reductor en el IBI”.
Como en años anteriores las familias numerosas podrán beneficiarse de una reducción del cincuenta por ciento en el IBI “y en esta edición se ampliará el número de núcleos familias porque se incrementará el límite del valor catastral de las viviendas con derecho a dicha bonificación”.
En el resto de tasas e impuestos habrá una congelación, excepto en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) que tendrá un simbólico incremento del dos por ciento.
“Esta subida se aplica por coherencia con la política fiscal de este equipo de Gobierno: que pague más quién más tiene. No se impone como medida recaudatoria ya que afecta solo a aquellas empresas que facturan más de un millón de euros anuales”, señala la edil.
Para el próximo año también se contempla una bonificación fiscal en el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica de un cincuenta por ciento, a petición de los propios vecinos, para los automóviles con más de cuarenta años de antigüedad.
Además, aquellos ciudadanos que lo soliciten podrán beneficiarse de planes personalizados de pago, como agrupar todos los impuestos y fraccionarlos hasta en seis meses.
El Ayuntamiento también atenderá casos particulares que planteen parados de larga duración, afectados por desahucios, entre otros, como lo viene haciendo ya de manera habitual la Oficina Tributaria (OTAF).
“Se trata de unas ordenanzas fiscales que se presentan en un escenario de indefinición en cuanto a los ingresos que el Ayuntamiento percibirá del Estado al estar el Gobierno en funciones. No hay certeza de la cuantía que se percibirá procedente del Estado y se hace un importante esfuerzo para amortiguar la presión fiscal a los vecinos”, indica la edil responsable de Hacienda.
El presupuesto del próximo ejercicio 2017 queda aprobado automáticamente al no haberse presentado, por parte de ningún grupo municipal, alegación alguna a la aprobación inicial del pasado mes de noviembre.