Madrid, 28 feb (EFE).- El equipo de restauración del Museo del Prado ha devuelto a «San Sebastián» de Guido Reni su belleza original, tras un largo proceso de restauración que ha eliminado del cuadro un repinte que censuraba una parte de su cuerpo y ha descubierto otros elementos.
La restauración, que comenzó en marzo de 2022, se ha realizado con motivo de la muestra que el museo prepara de Guido Reni, que abrirá las puertas el próximo 28 de marzo y que es la estrella de su programación este año.
El repinte ampliaba considerablemente el paño de pureza que cubría el cuerpo del santo y que tapaba su ingle. Su eliminación ha dejado al descubierto la parte del cuerpo del santo que había sido censurada, pero también otros elementos originales que estaban ocultos.
El proceso de restauración ha permitido que ahora se puedan ver la cuerda con la que están atadas las dos manos del santo al árbol y su mano izquierda en penumbra.
El proceso de limpieza ha definido aún con más fuerza la anatomía bañada por la luz de la luna y que desde el rostro «va modelando cada uno de los músculos del cuerpo hasta crear una figura de suma belleza y perfección», señala el Prado en una nota este martes.
Para el proceso de restauración, realizado por la conservadora Almudena Sánchez, se han usado radiografías y reflectografía infrarroja, aunque el museo asegura que a simple vista se podía apreciar la diferencia de técnica entre el repinte y el original.
El proceso de limpieza también ha permitido recuperar la profundidad de la composición y percibir mejor el espacio entre los planos, así como el aire que rodea la figura del santo.
El cuadro, realizado entre 1617 y 1619, apareció por primera vez en España en el inventario de la colección de Isabel de Farnesio en el Palacio de La Granja de San Ildefonso (Segovia) y en él se puede ver el inicio del martirio de san Sebastián.
