Laia Mataix Gómez
Cali (Colombia), 31 oct (EFE).- El secretario de Estado de Medio Ambiente de España, Hugo Morán, defiende la necesidad de una «hoja de ruta» que garantice la gestión de los recursos naturales y de la biodiversidad y que los compromisos frente al cambio climático sean «asumidos colectivamente» porque «nadie se salva aisladamente y nadie puede quedar liberado de su cuota de responsabilidad».
Así lo asegura en una entrevista con EFE en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP16) que se celebra en la ciudad colombiana de Cali, donde participa como máximo representante de España en el segmento de alto nivel para llegar a conclusiones antes de que finalice la reunión este viernes.
«España ha sido el primer país del mundo que ha incorporado una estructura de planificación de gestión de la biodiversidad» tras el acuerdo del Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal, señala.
Morán recuerda que «las políticas verdes no solo son unas políticas que responden a necesidades de preservación de calidad de vida», sino que, en términos económicos, «la política más rentable es la política que va dirigida a los proyectos, los planes, las estrategias que implican la activación de políticas verdes en el conjunto del planeta».
La financiación
Uno de los temas de negociación más difíciles en la COP16 es la financiación y movilización de recursos, a lo que Morán indica: «Es evidente que para un momento de crisis como el que vivimos va a ser necesario aportar recursos extraordinarios» frente a dos opciones.
«O somos capaces de detener el proceso de deterioro en el que estamos inmersos a lo largo de las últimas décadas y que pone en riesgo la propia capacidad del planeta de preservar sus recursos naturales, o vamos a entrar en una dinámica absolutamente desconocida que no sabemos hacia dónde nos va a llevar», dice el secretario de Estado.
Pero más allá de los recursos extraordinarios, que tienen «un periodo de pervivencia muy corto en el tiempo», continúa, la preocupación que existe es: «¿Y después de que se agoten los recursos extraordinarios qué vamos a hacer?», por lo que es necesario sostener esa dinámica en «las estructuras presupuestales ordinarias» de cada país.
«Ese es el debate que yo creo que es el que en estos momentos deberíamos incorporar», insiste.
España «ha sido pionera en dos acciones: una, adoptar su propio plan de restauración de la biodiversidad alineado con las decisiones de la cumbre de Kunming-Montreal y, en segundo lugar, uno de los primeros países que ha aportado financiación a ese fondo de restauración global, ya 10 millones de euros aportados, cuando muchos países están debatiendo cómo y cuánto es lo que lo que incorporan», defiende Morán.
«Predicamos con el ejemplo», agrega el alto funcionario.
El papel de Europa
España llega a la COP16 como parte del bloque de negociación de la Unión Europea, que «a lo largo de la historia ha venido presidiendo los objetivos de mayor ambición en el conjunto de la preservación de los recursos, de la defensa del planeta» y está «permanentemente» en la mira del resto de países, que le piden que «siga manteniendo ese liderazgo».
Sin embargo, en palabras de Morán: «A veces se nos coloca una carga que sobrepasa incluso nuestras propias capacidades».
«Europa está en condiciones de seguir liderando, y a lo largo de estas jornadas aquí en Cali lo ha verbalizado (…) pero al mismo tiempo ha dicho 'solos no podemos, es necesario que en este proceso haya un acompañamiento de compromiso del conjunto de las regiones del planeta'», declara.
En este sentido, España, que para Morán «es el país de la Unión Europea que lidera una política más ambiciosa en términos de preservación de la sostenibilidad a nivel de región europea», seguirá siendo un «tractor de la ambición de la UE», pero teniendo claro «que una sola región tiene un impacto pero no resuelve el conjunto de los problemas del planeta».