Golpear el capó de nuestro vehículo en invierno puede salvar vidas

A menudo, los animales urbanos se refugian en el motor de los vehículos durante el invierno

La bajada de las temperaturas hace que los animales callejeros busquen cobijo en cualquier lugar que encuentren. Uno de ellos, puede ser el interior de nuestro vehículo aparcado. La zona del motor es un espacio recurrente, especialmente para gatos, pues si lo acabamos de utilizar sigue desprendiendo calor por un tiempo.

Por ello, cada año las autoridades recuerdan en redes sociales la necesidad de golpear con suavidad el capó antes de arrancar el coche. Con este gesto, podemos evitar que los gatos u otros animales callejeros que se hayan refugiado en la parte interior de nuestro vehículo sufran daños o incluso la muerte. Además, evitaremos causar averías en nuestro vehículo. Esta medida suele servir para para que el felino se asuste y se vaya.

Después de golpear el capó, lo ideal es tocar el claxon para asegurarnos que ningún animal haya quedado dentro. No obstante, debemos afinar el oído pues en ocasiones se quedan atrapados. Si el animal no puede salir, conviene levantar el capó con cuidado, para evitar que nos arañe como autodefensa. Si no conseguimos sacarlo, podemos llamar a emergencias. De hecho, los bomberos están acostumbrados a realizar servicios de esta índole en esta época del año.