Berlín, 15 jul (EFE).- En el horizonte ya el Mundial de Estados Unidos, Canadá y México en 2026, la Eurocopa 2024 ha señalado la ruta de la continuidad a todas las selecciones, con el refuerzo para Luis de la Fuente o Gareth Southgate, la confianza inalterable en Didier Deschamps, Julian Nagelsmann o Roberto Martínez con Francia, Alemania y Portugal, respectivamente, más allá de que ninguno de los tres últimos avanzaron donde pretendían.
– Luis de la Fuente (España): Sin duda, el técnico que más reforzado sale de la Eurocopa. Su renovación hasta el próximo Mundial, a once días del estreno en Berlín, le reportó una confianza que él mismo supo transmitir a sus jugadores. Desde el debut ante Croacia hasta la final del campeonato ante Inglaterra, ninguna selección ha ofrecido mejor juego que la suya. Las dudas iniciales a su nombramiento y la polémica por los aplausos a Rubiales han quedado diluidas en esta Eurocopa. «Quiero seguir y creo que la RFEF (Real Federación Española de Fútbol) también», explicó en rueda de prensa tras proclamarse campeón de Europa.
– Gareth Soutgate (Inglaterra): Frente a la crítica, los resultados. No hay nada más incontestable en el fútbol. El técnico ha dirigido a Inglaterra a la tercera final de su historia de una gran competición, la segunda con él al mando, más allá de la derrota. Una eliminación en octavos o cuartos, cuando bordeó el abismo, habría sido un fin de ciclo. Su llegada hasta el penúltimo escalón puede avalar la continuidad de un entrenador siempre en entredicho, que debe renovar el contrato. «No es momento de hablar de eso ahora. Necesito hablar con las personas adecuadas y darme un poco de tiempo», expresó al término de la final perdida ante España.
– Didier Deschamps (Francia): Francia, con su ya veterano entrenador -12 años en el banquillo galo-, ha protagonizado una actuación discreta en cuanto a fútbol, pero con un resultado consistente al llegar a semifinales. Era el objetivo mínimo marcado. Tiene contrato hasta 2026. Phillipe Diallo, el presidente de la Federación Francesa de Fútbol, zanjó cualquier duda el día después de la derrota ante España, al asegurar su continuidad.
– Ronald Koeman (Países Bajos): Después de retornar al banquillo ‘oranje’ tras su paso por el Barcelona, el técnico neerlandés ha creado una selección poco vistosa pero segura en lo que pretende. Alejado del esteticismo que presidió históricamente a Países Bajos, Koeman ha apostado por la solidez defensiva y el contraataque, con Gakpo como principal baluarte ofensivo. Así se ha plantado en unas semifinales que le refuerzan para el siguiente torneo.
– Julian Nagelsmann (Alemania): Tras un aterrizaje forzoso en la selección, donde relevó a Flick, Nagelsmann empezó con dudas, pero, paso a paso, con la repesca de Toni Kroos, le dio firmeza a Alemania. En un campeonato en el que ha ido de más a menos, la eliminación ante España se antoja insuficiente para las aspiraciones germanas como anfitriona, pero ha podido implantar parcialmente su sello en el conjunto y, con su renovación hasta 2026, podrá apuntalar el nuevo proyecto teutón.
– Roberto Martínez (Bélgica): Tras su buen paso por el banquillo de Bélgica, el técnico español tenía la difícil tarea de reemplazar en Portugal a una institución como Fernando Santos. En esta Eurocopa se ha quedado a medio camino. Después de un buen inicio de torneo, con goleada incluida a Turquía, el combinado luso dejó síntomas de flaqueza en la fase decisiva. Disponía de un gran potencial en su equipo. Con contrato hasta 2026, su proyecto contiúa.
– Luciano Spalletti (Italia): El entrenador de Italia, que llegó respaldado por su sensacional etapa en Nápoles, se ha estrellado junto con el resto de la ‘Azzurra’. La carencia de estrellas en el ‘Calcio’ no le ha ayudado, ni tampoco él pudo reconducir el destino de una selección transalpina que se despidió en octavos de final. A pesar de las críticas de la prensa italiana, Spalletti fue ratificado para un ciclo internacional más, aunque ya sin margen de error.
– Zlatko Dalić (Croacia): El gran artífice desde el banquillo de la era gloriosa de Croacia se enfrenta a una encrucijada. Los grandes éxitos alcanzados por los balcánicos desde su llegada hace siete años le permiten continuar al frente de un combinado por el que renovó el pasado curso hasta 2026. Sin embargo, el fracaso de esta Eurocopa siembra de dudas el horizonte de la ajedrezada. El fin de ciclo de sus jugadores más expertos y deslumbrantes lo obliga a rearmar a su conjunto para la clasificación para el Mundial 2026.
– Vincenzo Montella (Turquía): El italiano, que asumió en octubre pasado el rumbo de un Turquía en un momento de incertidumbre que amenazaba con dejarlos fuera de la Eurocopa, se ha consolidado en el cargo. Ha dirigido a Turquía a su segunda mejor participación en la máxima competición europea, con el paso a los cuartos de final. Bien ganada tiene la continuidad.
-Domenico Tedesco (Bélgica): El italo-alemán, que tomó el relevo de Roberto Martínez en Bélgica, sigue en el proceso del cambio generacional en Bélgica, con el conflicto con Thibaut Courtois de fondo y con contrato hasta el Mundial 2026, renovado el pasado marzo. En la Eurocopa fue un equipo aún en construcción, irregular desde el principio y eliminado en los octavos de final por un gol en propia puerta de Jan Verthongen ante Francia.
– Ralf Rangnick (Austria): El considerado como patriarca del nuevo fútbol alemán ha reinventado a Austria. El germano tomó el control de la ‘Burschen’ hace dos años y, en ese tiempo, ha diseñado un equipo atractivo, dinámico y vistoso. Dadas las bajas en defensa con que acudió al campeonato, Rangnick reconvirtió al combinado centroeuropeo para volverlo aún más ofensivo, protagonizando una gran fase de grupos, en la que quedó primero por encima de las favoritas Francia y Países Bajos. Dos córners mal defendidos y una parada milagrosa del portero turco Günok le privaron de avanzar a cuartos de final. En Austria celebran su continuidad, confirmada tras descartar el propio técnico ofertas de clubes.
– Murat Yakin (Suiza): Suiza ha sido una de las escuadras más sólidas de la Eurocopa y gran parte del mérito lo tiene su seleccionador. Después de quedar segundos en el grupo, junto a Alemania, a la que casi ganan en Fráncfort, los suizos despacharon con suma facilidad a Italia en octavos y únicamente una tanda de penaltis contra Inglaterra les dejó fuera de las primeras semifinales de su historia. A pesar de la decepción, la federación helvética ha reconocido la labor de Yakin, prolongando su contrato tras la Eurocopa hasta 2026.
-Kasper Hjulmand (Dinamarca): El técnico danés saltó al estrellato tras conducir a semifinales a Dinamarca en la última Eurocopa en medio de la conmoción por el desvanecimiento que sufrió la figura de la selección Christian Eriksen. Tras ese éxito inicial, sus prestaciones han ido decayendo. Un Mundial en el que no pasaron de primera fase ha dado pie a una irregular Eurocopa, en la hicieron las maletas en octavos de final, aunque con el atenuante de haberse tenido que medir a la anfitriona Alemania. Tiene contrato hasta 2026.
– Edward Iordănescu (Rumanía): La Eurocopa le ha servido al preparador rumano a proyectar su imagen. Primero de su grupo, en los octavos de final cayó ante Países Bajos. Su vinculación con Rumanía terminó al final de la Eurocopa. Su futuro está en duda, aunque la Federación de Fútbol de Rumanía intenta convencerlo para continuar en el cargo.
– Francesco Calzona (Eslovaquia): El seleccionador de Eslovaquia también ha salido reforzado. Después de su breve paso por el Nápoles, el italiano ha vuelto a relanzarse en esta Eurocopa, llevando a los eslovacos a los segundos octavos de final de su historia en la competición, en los que tuvieron contra las cuerdas a Inglaterra, hasta el 1-1 de Jude Bellingham en el minuto 95. Su permanencia en Eslovaquia, con la que le une un acuerdo hasta 2025, está garantizada.
– Ivan Hašek (República Checa): Al histórico futbolista checo no le ha ido tan bien como a su vecino. Asumió el liderazgo de su selección en enero de este año, tras el rechazo de su predecesor, Jaroslav Šilhavý, a renovar con el equipo. Su desempeño en su primera prueba de fuego ha sido desalentador. Si bien es cierto que la República Checa no dispone en la actualidad de figuras de primer nivel europeo, Hašek tampoco ha conseguido difuminar las carencias del equipo. Tiene contrato hasta el final de la clasificación para el Mundial 2026.
– Willy Sagnol (Georgia): El entrenador francés ya puede decir que es historia del fútbol de Georgia. Su selección ya consiguió un gran logro clasificándose para su primera competición internacional. En Alemania ha engrandecido su éxito. Encuadrada en un duro e igualado grupo, el descorazonador debut ante Turquía fue revertido para, tras una gran victoria ante Portugal en la última fecha, acceder a las eliminatoria por el título. En octavos, España, con remontada incluida, puso fin al sueño georgiano. Su contrato concluye al término de este año.
– Matjaž Kek (Eslovenia): El técnico ha vuelto a obrar una proeza con el conjunto balcánico en su segunda etapa. Si en la primera ya los metió en el Mundial de Sudáfrica, en la segunda los ha guiado a los octavos de final de la Eurocopa, su nuevo tope en el campeonato continental, en los que llevó a Portugal al límite. Tras seis años en el cargo, tiene asegurada la estancia para otro ciclo más.
– Marco Rossi (Hungría): El entrenador italiano ha sido eliminado con Hungría en la primera fase, con dos derrotas y una victoria que no fue suficiente para ser uno de los cuatro mejores terceros. Pese a la eliminación y las dudas, su continuidad fue anunciada por la federación de Hungría, a la que intentará clasificar para su primer Mundial en 40 años.
– Dragan Stojković (Serbia): La leyenda del fútbol serbio no ha sido capaz de dotar a su selección del mismo carácter ganador que él exhibía en el terreno de juego. En el igualado grupo C, el combinado balcánico únicamente pudo sumar un punto ante la vecina Eslovenia. En la próxima clasificación para el campeonato de Estados Unidos, Canadá y México deberá corregir la perpetua fragilidad mental que caracteriza a la escuadra serbia.
– Steve Clarke (Escocia): El técnico escocés ha sido una nueva víctima de la eterna maldición que persigue a su país: no pasar nunca de la primera fase. Dos derrotas y un empate. Su contrato hasta 2026 con los británicos le augura la posibilidad de luchar por volver a meter a Escocia en un Mundial por primera vez desde Francia 1998.
– Sylvinho (Albania): El técnico brasileño, con pasado como jugador en LaLiga EA Sports, conformó, dentro de sus limitaciones, un buen equipo en Albania y la introdujo en la segunda competición europea de su historia. Se marchó de la competición con un solo punto. El acuerdo que le unía a Albania, país con el que se nacionalizó el año pasado, acaba el próximo 31 de julio.
– Michał Probierz (Polonia): Su labrada reputación en Polonia, merced a la cantidad de equipos allí dirigidos, le permitió dirigir a un conjunto al que clasificación en la Eurocopa en la repesca ante Gales. En Alemania 2024 no ha pasado la fase de grupos. Tiene contra hasta 2026.
– Serhiy Rebrov (Ucrania): Delantero icónico del fútbol ucraniano, fue reclutado por su excompañero Andriy Shevchenko para hacerse cargo del banquillo. En la Eurocopa, la contundente derrota en el primer partido ante Rumanía condicionó el resto de la clasificación. Con todos empatados a puntos, la diferencia de goles dejó fuera a la selección ucraniana. Su próximo desafío, para el que está asegurado, será el pase al Mundial 2026.
Juan Manuel Sánchez