Salvador Ruiz
Málaga, 25 feb (EFE).- La guitarra está falta en la actualidad de un líder, de estrellas como fueron Andrés Segovia en la modalidad clásica y Paco de Lucía en la flamenca, y ello pese a que hay muchos guitarristas excelentes, según destaca el presidente de la Fundación Mundial de la Guitarra Española y músico, Javier García Moreno.
Tras medio siglo abrazado a este instrumento, este guitarrista clásico multipremiado y catedrático de Guitarra que ofreció un millar de conciertos en tres décadas de carrera internacional por casi toda Europa y América y triunfó en lugares como Japón, es ahora patrono-fundador de la referida entidad, la 'World Spanish Guitar Foundation'.
«En la guitarra flamenca hay tantos guitarristas excelentes por el mundo que no hay un líder, hay muchísimos. Igual pasa con la guitarra clásica, que hay tanta gente hoy tocando que no hay un solo líder que se diga 'esta es la estrella de la guitarra clásica'. La estrella de la guitarra clásica fue Andrés Segovia y de la flamenca ha sido Paco de Lucía», resalta sobre la orfandad de liderazgo en este ámbito de las seis cuerdas.
En una entrevista con EFE echa en falta esa figura para que la guitarra tenga un peso relevante hoy porque cree que «el mundo comercial funciona así», con la fuerza de «un líder», alguien que «no solamente sea bueno, sino que además lidere y que sea querido, conocido y que todo el mundo quiera ir a ver».
Añade que esa misma situación ocurre con otros instrumentos musicales como el violín o el piano y ha citado a grandes músicos que se asociaron a su instrumento como Rostropóvich con el violonchelo, en violín Yehudi Menuhin, en el piano Barenboim o en la lírica Alfredo Kraus o Plácido Domingo, «estrellas así que lideran» y eso «a la guitarra hoy en día le falta y le hace falta».
Incide en que la guitarra «no tiene el gran público que tenía: Andrés Segovia llenaba salas de 5.000 personas en Estados Unidos y eso hoy en día no existe» y «Paco de Lucía con su guitarra flamenca llenaba lo que hiciera falta», pero «el esplendor de la guitarra continúa, hay muchos concertistas buenísimos y escriben muchos compositores», destaca.
Orquestas de guitarra en Japón, como las bandas en Valencia
García Moreno (Málaga, 1966) cuenta que «en China y Japón está renaciendo la inquietud por la cultura española y la guitarra es un máximo exponente de la cultura en España» y que «en Japón ocurre algo parecido a las bandas de viento en Valencia, donde cada pequeño pueblo tiene una; pues en Japón ocurre con orquestas de guitarra».
Mayores o estudiantes «montan orquestas de guitarra en cada pueblo» y eso «hace que haya una formación inicial, como ocurre en Valencia, y que cada vez el nivel de los guitarristas japoneses vaya en aumento».
En grandes orquestas europeas la sección de viento está formada por muchos valencianos «porque desde hace muchos años existe una cultura en torno al viento (en Valencia) que ha sacado muy buenos instrumentistas», explica este experto.
Javier García ha sido premiado recientemente por la 'Escuela Japonesa de la Guitarra de Tokio' por su trabajo en esas tierras, donde ha realizado hasta nueve giras de conciertos y publicó dos discos, uno de ellos grabado en directo en el Palacio de la Guitarra de Japón, donde tocó muchas veces: «Una construcción muy curiosa que es como una guitarra gigante y tocas dentro, todo de madera, con unas sonoridades que son increíbles».
Guitarra española nacida en Andalucía
Recuerda que la guitarra es un instrumento de origen español, «que es conocida en el mundo entero con el sobrenombre de guitarra española», con ese apellido. «La guitarra nace en España, pero en realidad en un sitio de España que es Andalucía», asegura.
La guitarra del guitarrero almeriense Torres se tocaba en toda España y, aunque se quedó con el nombre de 'guitarra española', «en realidad donde nace es en Andalucía».
Pese al protagonismo del violín dentro de la orquesta o el repertorio «tan apabullante» del piano, al que muchos llaman «el instrumento rey», resalta que «la guitarra tiene una belleza especial, que es su sonido cautivador», que «se agradece mucho dentro de la textura orquestal o en un cuarteto de cuerda» y que «el repertorio de guitarra como solista es maravilloso».
«Todo el mundo tiene una guitarra en su casa y la toca, hacer un punteíto o una música de acompañamiento mucha gente lo consigue», apunta.