La Policía brasileña allana las oficinas de un senador bolsonarista por el golpe de enero

El senador brasileño Marcos do Val habla con la prensa en el Congreso Nacional, en Brasilia (Brasil). EFE/André Borges

Brasilia, 15 jun (EFE).- La Policía Federal brasileña allanó este jueves oficinas y residencias del senador Marcos do Val, alineado con la ultraderecha que apoya al expresidente Jair Bolsonaro, en el marco de una investigación sobre el golpe del pasado enero.

La operación abarcó desde las oficinas de Do Val en el Senado hasta sus residencias en Brasilia y en Vitoria, capital del estado de Espíritu Santo, donde tiene su domicilio particular y se encontraba este mismo jueves.

La acción fue autorizada por el magistrado Alexandre de Moraes, responsable en la Corte Suprema de la investigación sobre la asonada del 8 de enero, cuando una horda de bolsonaristas asaltó los tres poderes de la Nación con la intención de derrocar al Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.

El senador es investigado en ese proceso desde febrero pasado, cuando denunció una rocambolesca trama golpista, que en realidad fue interpretada como un intento de descalificar al propio juez De Moraes.

En cuestión de una semana, Do Val dio varias versiones, algunas contradictorias, sobre su denuncia, en la que básicamente decía que en diciembre pasado, antes de la investidura de Lula, se reunió con Bolsonaro y Daniel Silveira, un activista de la ultraderecha más violenta y radical.

Según el senador, en ese encuentro le fue planteado que pidiera una reunión con De Moraes, también presidente del Tribunal Superior Electoral, y grabara la conversación sin que el juez lo percibiera.

La intención era, según Do Val, que De Moraes aceptara alguna supuesta irregularidad para favorecer a Lula en las elecciones, lo cual habría servido como una excusa para invalidar los comicios y mantener a Bolsonaro en el poder.

El propio De Moraes admitió que en diciembre pasado se encontró con el senador, quien le reveló ese supuesto plan pero se negó a presentar una denuncia formal.

«Me dijo que era una cuestión de ‘inteligencia’ y que no podría confirmarlo, con lo cual solo le agradecí, pues lo que no es oficial no existe», declaró en su momento el magistrado, quien calificó de «ridícula» toda esa supuesta trama.

Desde entonces, Do Val sostiene que el magistrado no puede seguir al frente de la investigación sobre los sucesos de enero porque, en su opinión, fue «avisado» de que había planes para un golpe y «fue omiso» frente a esas informaciones.

El senador, además, es miembro de una comisión parlamentaria que comenzó a funcionar hace un mes y tiene como objetivo investigar los sucesos de enero y las articulaciones previas a la asonada.

Esta misma semana, en una reunión de la comisión, Do Val insistió en que De Moraes debería dejar el caso referido al golpe de enero y, además, pasar a investigado por su supuesta «omisión».