La Residencia «Mil Diferencias», inaugurada hace poco más de un año como la primera del país para personas con síndrome de Prader-Willi, enfrenta un inminente cierre debido a la escasez de financiación por parte de las Administraciones públicas
La directora de la residencia, Aurora Rustarazo, está luchando contra reloj para encontrar recursos entre las Administraciones y entidades privadas que eviten la clausura, prevista para el 15 de diciembre debido a la falta de fondos.
Esta residencia, que ha acogido a nueve personas con síndrome de Prader-Willi, una enfermedad rara que provoca un apetito incontrolable, se ha convertido en un referente en el país. Sin embargo, la retirada de un importante donativo por parte de una empresa que apoyaba el proyecto ha puesto en riesgo su continuidad. Aurora Rustarazo busca financiación de manera urgente y espera que la Comunidad de Madrid pueda proporcionar el apoyo necesario para mantener la residencia abierta al menos hasta febrero del próximo año.
Si no se asegura la financiación antes de febrero, la residencia se verá obligada a cerrar, lo que no solo implicaría enviar a los residentes de vuelta a sus hogares, sino también significaría un «fracaso social» para el sistema. La directora lamenta que el cierre de este proyecto de calidad sería un golpe significativo y un obstáculo para futuras iniciativas similares.
Aurora Rustarazo destaca que el proyecto es un referente para el país y su cierre sería una pérdida significativa. La residencia «Mil Diferencias» proporciona estabilidad y mejora la calidad de vida de los residentes, quienes experimentan un apetito incontrolable y, en ciertos momentos, agresividad. El cierre significaría que estos residentes, provenientes de diferentes lugares del país, perderían el apoyo terapéutico y las mejorías en su sintomatología.
El Ayuntamiento ha expresado su compromiso con la entidad, pero la falta de financiación pone en peligro la continuidad de esta iniciativa única en el país. La directora espera que la visita de responsables del área de Discapacidad de la Comunidad de Madrid a finales de mes pueda arrojar luz sobre la situación y asegurar el futuro de la residencia.