Málaga, 31 dic (EFE).- El presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha propugnado este domingo un acuerdo con el Gobierno central para afrontar la demolición del hotel El Algarrobico, construido en Carboneras (Almería) y «símbolo del urbanismo salvaje en la costa mediterránea», una vez que el futuro de Doñana «está despejado».
Moreno, que ha elegido el Parque Nacional de Doñana para su mensaje de Navidad, ha puesto el acuerdo alcanzado recientemente con el Ejecutivo tras el conflicto sobre los regadíos como «buen ejemplo» del «esfuerzo» que pueden hacer los políticos por entenderse.
Tras aseverar que defiende «lo mejor» para Andalucía, «por encima de siglas políticas», ha dicho que está dispuesto a que este acuerdo sea «el primero de otros muchos pactos en favor del interés general», y ha tendido la mano al Gobierno para afrontar una «deuda» pendiente con el medioambiente en Andalucía, la demolición del Algarrobico.
«Ya va siendo hora de tirar al suelo esa mole de hormigón y devolver ese espacio al conjunto de los ciudadanos y a la propia naturaleza», ha afirmado.
El presidente ha confesado que le «gustaría» que Andalucía «siga siendo modelo de estabilidad y de tranquilidad política» en 2024: «esa es la vía andaluza, la de buscar puntos de encuentro en lugar de división», ha manifestado, y ha añadido que quiere que la región sea «un ejemplo a seguir, alejada del ruido, del escándalo y del insulto».
Más restricciones si no llueve en primavera
También ha llamado a la colaboración institucional y de los ciudadanos para «asumir juntos el desafío del agua»; los ciudadanos «mirando» por este bien escaso que hay que «usar con muchísima responsabilidad», y las administraciones «arrimando el hombro para hacer las obras».
«Andalucía necesita el agua más que nunca y más que nadie», ha remarcado Moreno, que ha incidido en que hoy miles de andaluces sufren cortes en el suministro de agua y los agricultores y ganaderos «viven preocupados mirando al cielo».
Aunque la Junta ha puesto en marcha más de mil obras hidráulicas, ha admitido que esta sequía «histórica» va «más rápida que las obras» que se ejecutan, por lo que «si no llueve en primavera, no habrá más remedio que aplicar restricciones».
Servicios públicos «mejorables, pero buenos»
En su discurso, el jefe del Ejecutivo andaluz ha dicho que la comunidad cuenta con unos «buenos servicios públicos. Mejorables, pero buenos», y ha expresado su compromiso a «seguir fortaleciendo» la sanidad pública y el resto de las políticas sociales.
«Hay problemas en la sanidad y hay personas que están esperando para que los vea un médico o una especialista. Lo sé, pero también la sanidad pública atiende cada día miles de casos que no pueden esperar», ha referido.
Además, ha aprovechado para pedir «prudencia» en las fiestas y en las reuniones con familiares y amigos ante el aumento de las infecciones respiratorias y de la covid que se está produciendo en estas fechas.
En materia educativa, se ha congratulado de la reducción de la tasa de abandono escolar «a las cifras más bajas de la historia de Andalucía, y de haber «abierto el camino al prohibir el uso de teléfonos móviles en colegios e institutos», una medida que ha sido «imitada» por diversas administraciones, entre ellas el Gobierno central.
Defensa de la igualdad y el peso de Andalucía
El presidente andaluz también ha aludido a la «preocupación de muchos andaluces ante el riesgo de que se rompa la igualdad entre los españoles», y ha rechazado un «trato privilegiado» a unos territorios sobre otros.
«Voy a defender Andalucía donde haga falta y ante quien haga falta», ha asegurado Moreno, quien ha prometido «dar la batalla para hacer valer el peso de Andalucía en población, extensión e historia».
La comunidad «se está convirtiendo en un polo de atracción de talento, de tecnología y de cultura admirado dentro y fuera de España» y acabará el año con «récord histórico» de turistas, ha destacado.