La entrada en vigor, el pasado 9 de octubre, del estado de alarma en Madrid y en otras ocho localidades de la región apenas se ha notado en la movilidad, que únicamente se ha reducido un 0,4 %, pero sí ha aumentado el uso del transporte público en la capital.
Según ha explicado el consejero de Transportes, Ángel Garrido, en declaraciones en Onda Madrid, los estudios comparativos que ha hecho su departamento de la movilidad en la región en las últimas semanas revelan que el estado de alarma no se ha traducido en menos movimiento de madrileños, con un descenso «no significativo».
Lo que sí ha aumentado de forma «notable» es el uso del transporte público en la capital, dado que «si confinas la ciudad la gente se mueve dentro».
Garrido ha insistido en que es «imposible» reducir al 30 % el aforo en el transporte colectivo, como plantea el borrador que propone el Ministerio de Sanidad para controlar al expansión del coronavirus, porque «ningún sistema de transporte es capaz de funcionar» con esa capacidad.
«Nadie tiene escondidos 500 trenes de Cercanías ni 500 vagones de Metro; podemos hacer pequeños ajustes, pero no garantizar una sobrecapacidad el 60 %», ha señalado. Por ello ha insistido en que si no se imponen restricciones a la movilidad esa reducción de aforos en el transporte colectivo no podrá llevarse a cabo.
Fuente: © EFE 2020.