Orban condiciona levantar veto a la ayuda a Ucrania a que Hungría reciba los fondos bloqueados

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, en Bruselas. EFE/EPA/OLIVIER MATTHYS

Bruselas, 15 dic (EFE).- Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea confían en lograr a principios de 2024 un acuerdo para seguir proporcionando asistencia financiera a Ucrania incluso si el Gobierno húngaro de Viktor Orbán mantiene el veto que ejerció en la primera jornada de esta cumbre europea a estas ayudas.

«Logramos un texto aceptable para 26 Estados miembros, pero fue imposible convencer al primer ministro Orbán de aceptarlo. Parece que tendremos que reorganizarnos el año que viene para llegar a un acuerdo o encontrar una solución alternativa», dijo el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, a su llegada al segundo día de la cumbre que los líderes celebran en Bruselas.

El veto de Hungría impidió esta madrugada lograr un acuerdo sobre al paquete de 50.000 millones de euros en ayuda a Ucrania para los próximos cuatro años pese a que el resto de Estados miembros sí apoyaron la última propuesta sobre la revisión del presupuesto comunitario para 2021-2027, en la que se enmarcan estas ayudas.

En lugar de continuar negociando este viernes, los líderes decidieron aplazar la decisión a enero con el objetivo de intentar que Hungría se sume al consenso y la ayuda a Ucrania se incluya dentro del presupuesto comunitario, aunque existe la posibilidad de seguir financiando a Kiev con un acuerdo intergubernamental que deje fuera a Budapest.

«Es posible que los 26 Estados miembros proporcionen el dinero de forma bilateral, no a través del marco financiero plurianual o los instrumentos de la UE, pero no es dónde queremos estar. Creemos que es posible tener un acuerdo a 27 y queremos hacerlo en el año nuevo», dijo Varadkar.

En la misma línea, el primer ministro lituano, Gitanas Nauseda, consideró que hay posibilidades de lograr un acuerdo unánime aunque para ello sean necesarias «varias semanas» y una reunión extraordinaria de jefes de Estado y de Gobierno el año que viene.

«Tenemos una mayoría muy clara de países que firmarían el acuerdo hoy mismo, pero el consenso y la unidad es fundamental para nosotros también, así que vale la pena hacer esfuerzos e involucrar a todos los países», añadió.

Su homóloga estonia, Kaja Kallas, insistió en que «hay una fuerte voluntad de ayudar a Ucrania» y que «definitivamente se encontrará una solución» para entregar la ayuda financiera, aunque hacerlo fuera del presupuesto sería «mucho más difícil» puesto que tienen que diseñarse nuevos instrumentos y pasar por los parlamentos nacionales.

«Estaba claro que no llegaríamos a una conclusión anoche. Tuvimos una victoria sobre las negociaciones de adhesión, así que no había manera de que Hungría diese otra buena noticia», dijo Kallas, después de que Orbán no llegase a cumplir su amenaza de vetar la apertura de negociaciones con Ucrania para su acceso a la UE, pero sí bloquease la ayuda financiera.

«El mensaje para Ucrania es que tenemos que trabajar en algunos detalles, pero estaremos ahí para apoyarte», dijo el primer ministro belga, Alexander De Croo, quien subrayó que ayer se lograron «muchos avances» y consideró posible llegar a un acuerdo que espera sea a veintisiete aunque para ello sea «prudente tomarse unas semanas».

Por su parte, Orbán vinculó hoy su apoyo a las ayudas a Ucrania a que la Comisión Europea desbloquee todos los fondos que mantiene congelados a Budapest por violaciones del Estado de Derecho, de los que ya liberó 10.200 millones de euros el miércoles tras avalar la reforma judicial húngara pero mantiene retenidos otros 21.000.

«En dos meses, quizá más, nos reuniremos y veremos qué ha pasado. Si alguien quiere modificar la ley presupuestaria, esa será una buena oportunidad para que Hungría reciba lo que le corresponde. Todo», dijo esta mañana en declaraciones a la radio pública Kossuth desde Bruselas.