PSOE y Vox rechazan el presupuesto de Sevilla y fuerzan al alcalde a una cuestión de confianza

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, enfrenta un desafío significativo tras el rechazo de su presupuesto para 2024 por parte de los tres grupos de la oposición: PSOE, Vox y Podemos – Izquierda Unida

Después de una semana de negociaciones infructuosas, el pleno municipal ha votado en contra del presupuesto propuesto por el Partido Popular en una sesión extraordinaria. Este desenlace esperado empuja al alcalde a una cuestión de confianza vinculada a los presupuestos, que tendrá lugar el próximo viernes.

Juan Bueno, portavoz del grupo popular, defendió el presupuesto calificándolo como «el mayor de la historia del Ayuntamiento de Sevilla» y esencial para cubrir necesidades fundamentales como subidas retributivas, ciberseguridad y mantenimiento de empresas municipales. Sin embargo, los grupos de la oposición presentaron tres enmiendas a la totalidad, todas rechazadas, argumentando que el presupuesto no resuelve los problemas de la ciudad y muestra una previsión de ingresos irreal.

El alcalde Sanz criticó duramente la postura de la oposición, acusando al PSOE y Vox de unirse «contra Sevilla» y centrarse en resolver problemas personales en lugar de los de la ciudad. Antonio Muñoz, portavoz socialista, respondió que negociar no es aceptar propuestas sin reflejo presupuestario y calificó la oferta del PP como una «engañifa«.

Ismael Sánchez, de Podemos – Izquierda Unida, acusó al presupuesto de ignorar la autonomía financiera local y perpetuar la brecha entre ricos y pobres en Sevilla. Cristina Peláez, de Vox, describió las negociaciones como «teatro» y señaló errores en el presupuesto, como una previsión de ingresos irreal y gastos superfluos.

Ante este escenario, José Luis Sanz se someterá a una cuestión de confianza vinculada a la aprobación del presupuesto. Si no supera la votación, se abrirá un plazo de un mes para que la oposición presente una moción de censura y un candidato alternativo a alcalde, una tarea complicada que requeriría un acuerdo entre PSOE y Vox.

La Ley Orgánica del Régimen Electoral General permite que, si la cuestión de confianza no prospera y la oposición no presenta una moción de censura, se entenderá por otorgada la confianza y se aprobará automáticamente el presupuesto. Este proceso es crucial para Sanz, quien ha gobernado con un presupuesto prorrogado diseñado por el PSOE durante su primer año de mandato y busca más libertad para implementar sus inversiones y proyectos en el segundo año.

La situación pone en juego importantes inversiones para Sevilla, como la reforma del Teatro Lope de Vega, mejoras en la limpieza y actuaciones urgentes en los barrios. La cuestión de confianza del viernes determinará el rumbo financiero y político de la ciudad en los próximos meses.