La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera ha defendido este miércoles los presupuestos de su departamento para 2021, que prevén un incremento del 132 % para reactivar la economía, pero sin perder un ápice de protección ambiental.
Para la oposición, en estos presupuestos se echa en falta la Ley de Cambio Climático, una norma en trámite parlamentario, que comenzó a gestarse bajo el gobierno de Mariano Rajoy y que al PSOE no le interesó en 2018, según ha explicado el diputado del PP Guillermo Mariscal.
En el debate de presupuestos del Congreso de los Diputados, la ministra ha explicado que el objetivo de su departamento para los próximos meses será dar certeza en un momento de «extraordinaria incertidumbre», pero con la «confianza y esperanza» en salir de esta crisis mediante un crecimiento solido, sostenible e inclusivo.
Ribera ha urgido «respuestas globales y conjuntas», y para ello ha observado que su Ministerio alcanzará en 2021 los 12.307 millones de euros, de los cuales 6.805 millones proceden del Fondo de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea, la «mejor herramienta» para abordarlos.
La partida más importante de gasto corresponde a la transición energética justa, dentro de unos presupuestos que la ministra tilda de «inaplazables, indispensables para la modernización y recuperación de la economía, la justicia y la equidad.»
Para Ribera, estas partidas nacen con el objetivo de «impulsar la transición ecológica sólida hacia las renovables, la eficiencia y la movilidad sostenible, además de proteger la biodiversidad, impulsar la economía circular y garantizar la cohesión social y la igualdad de oportunidades en todo el territorio.
La cantidad destinada a medio ambiente asciende a 2.452 millones incluyendo los fondos europeos, de los que 601 millones de euros irán destinados a implementar la conservación y restauración de ecosistemas marinos y terrestres y su biodiversidad, 500 millones a economía circular, 149 millones a preservación de los recursos hídricos y 144 millones a preservación del litoral.
Las inversiones también se centrarán en políticas ambientales frente «a las terribles amenaza que suponen los incendios forestales», en depuración de aguas, «algo en lo que España no puede esperar más», y en el refuerzo de recursos y capacidades en meteorología, porque todos, ha incidido Ribera, necesitamos saber más sobre clima.
Asimismo, ha hecho énfasis en la conservación de la biodiversidad marina, con el impulso a áreas marinas protegidas, programas de conservación de especies y hábitats marinos y mejora del patrimonio natural, a través de sistemas de seguimiento de la biodiversidad.
En el apartado de agua, destacan las actuaciones previstas en conservación hidro-morfológica, reservas naturales fluviales, inversiones para mejorar la seguridad de las presas y los embalses y en la costa y adaptación al cambio climático, mediante la recuperación de zonas degradadas.
En el turno de réplica de los grupos parlamentarios, el PP ha reprochado a la vicepresidenta que «lleve dos años para sacar adelante» la Ley de Cambio Climático, un texto cuyas bases, según ha argumentado el diputado Guillermo Mariscal, «se gestaron en 2018» bajo el gobierno de Mariano Rajoy, «pero como no ponía PSOE en el encabezamiento, no les interesó».
Por parte de Ciudadanos, la diputada María Carmen Martínez Granados ha recriminado al Gobierno que pudiendo aprobar los presupuestos «por la vía moderada» haya elegido «la vía separatista, la de Bildu y Esquerra», y ha lamentado que se hayan rechazado enmiendas de su grupo destinadas, por ejemplo, a reparar los daños de las DANAS o a fomentar la movilidad eléctrica, «porque PSOE y Unidas Podemos deben pensar que no se necesitan».
Vox también ha argumentado su voto en contra de los presupuestos en que el Gobierno «no será capaz de gestionar bien los fondos viendo su nefasta gestión en la pandemia».
Otros grupos de la oposición, como Equo o Compromís, han lamentado que se haya eliminado el impuesto al diésel o que no se dote de fondos suficientes a las cuencas hidrográficas, a la mejora del litoral, a la industria o a las energías verdes.
Fuente: © EFE 2020.
