El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha dicho este miércoles que no ha recibido «con agrado» la propuesta del Gobierno de aplicar las mismas limitaciones en los municipios de más de 100.000 habitantes con alta incidencia de covid-19, un asunto que ha conocido por los medios de comunicación, ha asegurado.
El principio de acuerdo alcanzado ayer entre el Ejecutivo y la Comunidad de Madrid será estudiado en el Consejo Interterritorial de Salud de este miércoles.
En una entrevista en Euskadi Irratia, Urkullu ha remarcado que «no es conveniente suavizar» las medidas vigentes en Euskadi y no ha descartado la posibilidad de intensificarlas en otoño.
Ha señalado que a lo largo de la semana el Gobierno Vasco habló con el ministro de Sanidad y con otros representantes sobre las decisiones que se podrían adoptar, pero ha indicado que tuvo conocimiento de las mismas «ayer por la noche a través de los medios de comunicación».
Urkullu ha considerado que «parece» que el preacuerdo de establecer criterios comunes se ha tomado «para someter a la Comunidad de Madrid» y ha indicado que se verá si las medidas se consensúan en el Consejo Interterritorial.
En este sentido ha explicado que su ejecutivo ha planteado otros criterios, como el de la densidad de población, al tiempo que ha defendido que hay que analizar «en detalle» los lugares en los que se ha dado la contaminación por covid-19.
«En mayo anunciamos que las medidas se tomarían de forma localizada y de esta forma se ha actuado desde julio y ha dado resultados«, ha indicado.
Ha reconocido que el preacuerdo entre Sanidad y la Comunidad de Madrid «de alguna manera limita la capacidad de gestión» de la crisis del Gobierno Vasco y ha sostenido que «no es necesario» un nuevo estado de alarma.
«Existe un debate jurídico en torno a la movilidad pero no en otras medidas que se pueden adoptar y no creo que fuera de ayuda el establecimiento de un estado de alarma disfrazado», ha explicado.
A su juicio hay capacidad para la coordinación entre las comunidades autónomas si hay voluntad y ha indicado que siempre han tenido «palabras» desde el Gobierno, sobre todo desde el ministro Salvador Illa, pero ahora «hay que ver qué hay detrás».
Fuente: © EFE 2020.