Pekín, 17 nov (EFE).- El presidente chino, Xi Jinping, se encaró con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, en los márgenes de la cumbre del G20 en Indonesia para acusarlo de filtrar a la prensa una conversación privada entre ambos, momento grabado por las cámaras canadienses hasta hacerse viral en las últimas horas.
En una imagen muy inusual para el habitual hieratismo de los líderes chinos, Xi se saltó por una vez el protocolo para acusar al canadiense, delante de las cámaras, de haber filtrado el contenido de una reunión privada mantenida anteriormente.
«Todo lo que discutimos se ha filtrado a los periódicos. No es apropiado, y además tampoco es la forma en la que se llevó a cabo nuestra conversación», le espetó Xi a Trudeau ante la presencia de un traductor.
«Si está siendo sincero, debemos comunicarnos con respeto mutuo. Si no, no estoy muy seguro de qué va a pasar», agregó.
Trudeau, impasible frente a la regañina, respondió que «en Canadá creemos en el diálogo libre, abierto y franco», y que «eso es lo que seguiremos teniendo».
«Continuaremos buscando trabajar juntos de manera constructiva, pero habrá cosas en las que no estaremos de acuerdo», añadió.
Xi interrumpe entonces al líder canadiense para exigirle en dos ocasiones que tiene que «crear las condiciones» para seguir hablando, antes de sonreír, estrecharle la mano y marcharse.
La interacción entre ambos fue grabada por los periodistas canadienses que acompañaban a Trudeau y se ha convertido en viral a raíz de su publicación en redes sociales como Twitter por parte de la cadena CTV National News.
Según la prensa canadiense, el enfado del líder chino viene porque el diario National Post informó de que en una conversación mantenida el pasado martes, Trudeau le planteó «graves preocupaciones» por presuntas interferencias de China en las elecciones canadienses de 2019.
Según la cadena CTV News, de la conversación informal de cerca de diez minutos que ambos habían mantenido el martes en la sesión de apertura de la cumbre del G20, por iniciativa de Trudeau, se había filtrado también que el primer ministro canadiense había confrontado a Xi por su postura frente al cambio climático.
Aunque no se dieron detalles sobre las cuestiones tratadas, la prensa canadiense indicó que otros de los temas que Trudeau planteó a Xi fueron la invasión rusa de Ucrania, el respeto a los derechos humanos y el lanzamiento de misiles balísticos por parte de Corea del Norte, así como de la importancia de mantener el diálogo
Según declaraciones de la ministra canadiense de Exteriores, Melanie Joly, recogidas por la prensa canadiense, el intercambio entre Xi y Trudeau había sido «respetuoso».
«Fue una buena conversación y es realmente importante mantener los canales abiertos», dijo Joly, quien también el martes se había reunido con su homólogo chino, Wang Yi, al que le dijo que es responsabilidad de China «demostrar que respeta las normas internacionales».
La del martes era la primera vez que Trudeau y Xi se reunían en más de tres años, después de que los lazos entre los dos países se deterioraran gravemente tras el arresto en 2018 en Canadá de la ejecutiva Meng Wangzhou -de la tecnológica china Huawei- a petición de Estados Unidos.
Poco después, los canadienses Michael Kovrig y Michael Spavor fueron arrestados en China y juzgados por espionaje, y no fueron liberados hasta que Canadá hizo lo propio con Meng.