Lucía Serrano y Marina Segura
Madrid, 11 jul (EFE).- La gratuidad de la universidad, más plazas públicas de 0-3 años, una prueba única de la Ebau y cambiar la ley educativa son promesas de los partidos de cara al 23 de julio, que ponen sobre la mesa grandes diferencias sobre el modo de mejorar el sistema y que adolecen de concreción sobre el cómo y el cuándo.
La educación es una competencia de las comunidades autónomas y gestionan el grueso del presupuesto, que roza el 5 % del PIB español y que, pese a las sucesivas subidas, continúa por debajo de la media de la Unión Europea y de la OCDE.
A continuación las principales propuestas electorales de PSOE, PP, Vox y Sumar, que se han resumido en diez promesas por partido:
PSOE: universidad gratuita y más control a la escuela concertada
– Gratuidad total de las tasas universitarias y de la Formación Profesional a los alumnos que aprueben sus asignaturas en tiempo, y gratuidad del transporte urbano para niños y estudiantes hasta los 24 años.
– Combatir la segregación escolar mediante «la actualización de los módulos y de otros costes de funcionamiento de los centros concertados sostenidos con fondos públicos para asegurar que su oferta es accesible a todas las familias sin peajes ocultos o sesgos de cualquier tipo en la admisión».
– Incremento de becas e impulso a la gratuidad de los libros de texto.
– Oferta suficiente de plazas públicas gratuitas para niños de 0 a 3 años.
– Programas de refuerzo en horario extraescolar y unidades de acompañamiento para acabar con el riesgo de absentismo, fracaso escolar y repetición.
– Bajada de ratio en aquellos centros que presenten un proyecto de mejora.
– Promover la educación emocional en el currículum y la extensión de planes de bienestar emocional en todas las etapas.
– Ayudas para comedor y ampliación del horario de apertura de los centros.
– Ayudas de transporte para alumnos de FP con el centro alejado en más de 20 kilómetros de su casa, cuando no haya una oferta más próxima.
– Aumento de plazas públicas de Formación Profesional, garantizando la diversificación de la oferta pública y el ajuste con las demandas del mercado laboral.
PP: cambiar la Ley Celaá y una prueba única para entrar a la Universidad
– Modificar la Lomloe, más conocida como Ley Celaá, y la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU).
– La educación de 0 a 3 años será universal y gratuita y estará cofinanciada por el Estado y las comunidades.
– Un programa de tutorías extraordinario, «que permita superar la pérdida de aprendizaje que todavía persiste tras el Covid-19».
– Reducción de las tasas de abandono escolar temprano y mejorar los resultados de comprensión lectora.
– «Defender la libertad de los padres para elegir el centro y el tipo de educación que quieren para sus hijos: ya sean éstos centros públicos, privados o concertados, ordinarios o de educación especial, dentro de las posibilidades existentes».
– Garantizar que, en las comunidades con más de una lengua oficial, «ambas tendrán la consideración de vehiculares de acuerdo con el patrón de equilibrio lingüístico, asegurando que todos los estudiantes escriban y se expresen correctamente en castellano y en la lengua cooficial correspondiente».
– Asegurar un sistema nacional de becas y ayudas al estudio para promover la igualdad de oportunidades.
– Implantar una prueba de acceso a la Universidad (EBAU) común para todo el territorio, cuyas condiciones básicas, incluyendo su evaluación, deberán ser fijadas por el Gobierno, previa consulta a las comunidades autónomas y a los órganos de representación de las universidades, para «garantizar la igualdad de oportunidades».
– Reforzar los contenidos curriculares, en concreto el de las asignaturas troncales; asegurar un contenido común para todos los alumnos con independencia de donde estudien y dotar a los centros de autonomía para optar por la especialización curricular.
– Garantizar «la neutralidad ideológica en las aulas, el fomento del pensamiento crítico y el respeto a la Constitución y a las leyes».
Vox: educación nacional y fin del adoctrinamiento «progre»
– Una Ley Nacional de Educación que sirva de elemento de cohesión territorial y con contenidos comunes, que prestarán especial atención a las aportaciones de España a la civilización y «las gestas de los héroes nacionales».
– Devolución al Estado de las competencias en Educación y derecho a ser educado en español en todo el territorio.
– Prueba única de acceso a la universidad.
– «Pin parental» y derogación de la «Ley Herodes» (Ley de Infancia)
– Defensa de la educación diferenciada por sexos y libre elección de centro mediante un «cheque escolar».
– Los alumnos no podrán pasar de curso con suspensos.
– Recuperar el prestigio y la autoridad del profesor.
– Mejorar el sistema de becas y ayudas fiscales a las familias para comedor, transporte o uniforme en función del número de hijos.
– Universidades libres de «imposiciones ideológicas» e impulso de las Humanidades como vehículo de «la tradición cultural de España y Occidente».
– Impulso de la FP dual.
Sumar: educación pública, gratuita y laica
– Gratuidad de todas las etapas educativas, con especial atención a la educación de 0 a 3 años y a la FP.
– Ley de Financiación del Sistema Público Educativo que garantice el 5 % del PIB en gasto educativo (avanzando progresivamente al 7 %) y 1% destinado a las universidades públicas.
– Fin de la cesión de suelo público para construir centros privados y revisión de los conciertos, que serán retirados a los que «seleccionen» al alumnado en función de sus características socio-económicas.
– Las enseñanzas artísticas superiores tendrán rango de estudios universitarios.
– Educación pública y laica: prescindir de «contenidos doctrinales y confesionales».
– Educación sexual en todas las etapas y un plan para hacer frente a los problemas de salud mental en los centros.
– Disminuir las ratios de estudiantes por aula y aumento del número de docentes y especialistas.
– Plan de lucha contra el calor en los colegios.
– Avanzar hacia la gratuidad de la universidad, comenzando por el primer curso, y eliminar «el castigo económico» en las tasas de las asignaturas suspensas.
– Garantizar la calidad de las prácticas externas.
