El presidente electo de Guatemala rechaza las acusaciones de la Fiscalía en su contra

El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, en una fotografía de archivo. EFE/Lenin Nolly

Ciudad de Guatemala, 21 nov (EFE).- El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, aseguró este martes que las acusaciones con las que buscan remover su inmunidad son falsas, en un caso por supuestos daños al patrimonio local que empezó hoy con el proceso judicial contra una excandidata a diputada.

Arévalo de León, del partido Movimiento Semilla, defendió su inocencia y la de los miembros de su partido, en un caso presentado el 16 de noviembre por el cual el Ministerio Público (Fiscalía) busca implicar también a la vicepresidenta, Karin Herrera.

«Nadie debe ser perseguido por sus opiniones políticas. La verdad y la justicia prevalecerán», subrayó el presidente electo en sus canales de comunicación.

«No dejaremos que pisoteen la semilla de la esperanza», añadió el académico de 64 años, electo sorpresivamente en las elecciones de este año cuando las encuestas lo colocaban en séptima u octava posición.

Arévalo de León, diputado en la actualidad, estuvo presente este martes en el Congreso, donde según medios locales advirtió que el caso en su contra no tiene sustancia.

Mientras tanto, a pocos kilómetros, la excandidata a diputada Marcela Blanco, de 24 años, brindó su primera declaración en el proceso judicial que se inició el pasado 16 de noviembre en contra de 27 personas (cinco detenidas actualmente) por un supuesto caso de daños al patrimonio nacional.

Dicho caso es el mismo por el cual se vincula a Arévalo de León y a Herrera, al igual que a varios diputados del Movimiento Semilla y también de la oposición.

En la presentación del caso, el 16 de noviembre, la Fiscalía dijo que las acusaciones tienen como origen la toma a la fuerza en 2022 del campus de la universidad de San Carlos (la única estatal), por parte de docenas de estudiantes, en rechazo a las elecciones celebradas ese año en la casa de estudios superiores.

Arévalo de León había advertido desde el 1 de septiembre que la fiscal general, Consuelo Porras, lleva a cabo un «golpe de Estado» en su contra para evitar que tome posesión el próximo 14 de enero.

«Esto es una persecución política por denunciar la corrupción», aseveró este martes a EFE Blanco, a su llegada a la Torre de Tribunales de la Ciudad de Guatemala previo al inicio del procedimiento en su contra.

El juez Víctor Cruz, sancionado por Estados Unidos, empezó con el procedimiento judicial al final de la mañana de este martes, en la cual decidirá si imputa a Blanco y a otros cinco estudiantes y profesores universitarios detenidos.

Desde el 12 de julio, la Fiscalía ha judicializado el proceso electoral de Guatemala e intentado cancelar el partido de Arévalo de León, así como revertir los resultados de los comicios celebrados el 25 de junio y el 20 de agosto.

Protestas en favor de la democracia

También este martes, varias caravanas de vehículos se manifestaron en contra de los intentos de la Fiscalía por evitar la investidura de Arévalo de León.

Las caravanas, procedentes del oeste del país centroamericano, culminaron su recorrido en el centro de la Ciudad de Guatemala, donde se unieron a organizaciones indígenas y otros sectores para protestar en defensa de la democracia.

La protesta de este martes en el centro de la capital del país fue convocada la semana pasada por comunidades indígenas y secundada por la gremial de transportistas del departamento (provincia) de Sololá, organizadores de las caravanas, tras el nuevo movimiento del Ministerio Público (Fiscalía) contra el presidente electo y su partido.

El pasado 17 de noviembre, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, puntualizó que se encuentra «alarmado» por las últimas acciones de la Fiscalía e hizo un «llamamiento a las autoridades a garantizar que la voluntad democrática expresada en las urnas se respete».