Dubái, 5 dic (EFE).- El enviado especial de EE.UU. para el Cambio Climático, John Kerry, anunció este martes en la Cumbre del Clima (COP28) en Dubái la primera estrategia global para comercializar la fusión nuclear como una nueva fuente de energía limpia y acelerar sus planes de lucha contra el cambio climático.
«Creo que la fusión puede ser una pieza fundamental de nuestro futuro energético, junto con la energía eólica, la solar, la nuclear (…) y otras fuentes de energía», dijo el estadounidense en su discurso en el que presentó esta estrategia, en la que ya hay implicados 35 países.
Esta iniciativa -dijo- identifica cinco áreas de trabajo, que son el mercado y la cadena de suministro, la regulación, la mano de obra, investigación y desarrollo, así como la educación.
«Nos acercamos cada vez más a la realidad de la energía de fusión», afirmó en su alocución.
Los científicos llevan décadas estudiando la posibilidad de obtener energía mediante fusión nuclear, un proceso inverso a la fisión que se produce en las centrales atómicas convencionales.
Si se lleva a cabo con éxito, la fusión podría tener una ventaja importante sobre las plantas de fisión nuclear que dividen átomos, ya que no produce desechos radiactivos duraderos y también podría proporcionar una fuente barata de electricidad libre de carbono.
Pese a que la comunidad científica es cada vez más tajante en la necesidad de hacer una transición hacia energías limpias para combatir el cambio climático, la inversión en temas como la fusión nuclear se ha desacelerado, también en Estados Unidos, ante la incertidumbre económica postpandémica.
Datos del último informe de la Asociación de la Industria de la Fusión (FIA) muestran que en total la inversión en la industria mundial de la fusión en 2023 ha sido de 1.400 millones de dólares, frente a los 2.830 de un año antes.
En el total histórico, las empresas internacionales de fusión han obtenido alrededor de 6.210 millones de dólares en dinero principalmente privado.
De hecho, la principal duda de los científicos es que la fusión será demasiado costosa y llevará demasiado tiempo desarrollarla para ayudar en la lucha contra el cambio climático.