El comisario de Economía apoya utilizar deuda común para financiar inversiones en defensa

Imagen de archivo del comisario de Economía, Paolo Gentiloni.EFE/EPA/MARTIN DIVISEK

Gante (Bélgica), 23 feb (EFE).- El ministro francés de Finanzas, Bruno Le Maire, afeó este viernes la falta de avances para integrar los mercados de capitales de la Unión Europea y propuso comenzar a hacerlo con los países que quieran sumarse voluntariamente, algo a lo que se opuso su homólogo alemán, Christian Lindner.

«Hago una llamada a todos los Estados europeos que lo deseen para lanzar la unión de mercado de capitales sobre una base voluntaria. Será quizás en dos, tres, cuatro etapas, no importa», dijo La Maire a su llegada al consejo informal de ministros de Economía y Finanzas de la UE que se celebra en Gante (Bélgica).

El ministro francés criticó la falta de avances en un proyecto que busca facilitar las inversiones transfronterizas, incluidas las de los minoristas, y abogó por comenzar con los países dispuestos a ello puesto que «empezar a 27 es imposible», sobre la base de tres propuestas.

La primera sería una supervisión por parte de la Autoridad Europea de Mercados y Valores (ESMA), con sede en París, a la que podrían someterse voluntariamente los bancos de inversión, bolsas y gestoras de activos que lo deseen.

La segunda, la creación de un producto de ahorro europeo común entre los Estados que quieran unirse; y la tercera, una garantía para titulizaciones de modo que estas «dejen de pesar en los balances de los bancos» y estos puedan prestar más a particulares y empresas.

El ministro francés abogó además por una «simplificación drástica de las normas europeas» y una mayor inversión en innovación, en particular inteligencia artificial, para mejorar la productividad, con el fin de «liberar al crecimiento» europeo de las «tres cadenas» que lo frenan: la falta de dinero disponible, las normas y la falta de inversión en innovación.

«Europa debe tomar conciencia de que si quiere desempeñar un papel en el siglo XXI entre China y Estados Unidos, hay que cambiar el chip», señaló Le Maire a su llegada a un encuentro en el que los ministros debatirán cómo impulsar la competitividad europea, por un lado movilizando inversión privada vía mercados de capitales y, por otro, pública a través del Banco Europeo de Inversiones.

El ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner, sin embargo, defendió que el objetivo debe ser una integración con 27 países.

«No estoy a favor de una unión de mercados de capitales a varias velocidades, como mi amigo Bruno dice, sino más bien a una unión de mercados de capitales a máxima velocidad, es decir, avanzar rápido con los Veintisiete», dijo.

No obstante, no descartó que algunas iniciativas «puedan ser concebidas bilateralmente» y saludó, en particular, la propuesta sobre titulización.

Por su parte, el ministro español de Economía, Carlos Cuerpo, consideró que en los últimos años se han dado «pasos muy pequeños que no están consiguiendo cerrar la brecha (de inversión), sobre todo con Estados Unidos» y subrayó que urge movilizar capital privado, en particular de inversores minoristas.

Cuerpo defendió que es «de máxima urgencia» avanzar y que existe «una ventana de oportunidad para empujarlo. A partir de ahí, tenemos que desarrollar instrumentos específicos sin volvernos locos en cuanto al número de instrumentos», indicó.

Sobre la propuesta francesa, el ministro solo señaló que España está «dispuesta a avanzar con elevado grado de ambición» y estará «presente» en esas discusiones.

La idea de Le Maire viene a poner en cuestión el trabajo del presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe, quien se ha marcado como prioridad dar pasos concretos hacia la unión de mercados de capitales, en la que la UE lleva más de una década trabajando, y cuyo objetivo para la reunión era consensuar una declaración conjunta que aprobar en marzo.

«La declaración de hoy no es suficiente, estoy harto de discusiones y declaraciones vacías. ¿Realmente creen que China y EE.UU. estarán impresionados por nuestras declaraciones? Necesitamos decisiones fuertes», dijo el ministro francés.