Cracovia (Polonia), 11 abr (EFE).- El primer ministro polaco, Donald Tusk, reiteró este jueves su oposición a cualquier mecanismo de redistribución de solicitantes de asilo en el marco del pacto sobre asilo y migración que recibió el miércoles el visto bueno del Parlamento Europeo y afirmó que «protegerá» de él a Polonia.
En un mensaje publicado hoy en sus redes sociales, Tusk recordó que «los eurodiputados que representan a Polonia votaron en contra» del pacto migratorio y abogó por «poner fin definitivamente al debate» sobre esta cuestión, aunque los representantes de Polonia 2050 e Izquierda, que forman parte de la coalición del Gobierno polaco, sí votaron a favor del documento.
«Soy consciente de que algunas personas se sentirán ofendidas», declaró anoche Tusk en una rueda de prensa, «y la mitad de las capitales (me llamaron) para hablarme sobre este tema, pero no cambiaré de opinión», aseguró.
El jefe del Ejecutivo subrayó que «protegerá a Polonia del mecanismo de reubicación» y que éste «no se aplicará en Polonia» aunque para ello haya que «encontrar alguna manera» de impedirlo, incluso si el pacto «entra en vigor más o menos en la forma en que se ha votado».
El Parlamento Europeo aprobó ayer tras largas deliberaciones un paquete de medidas de migración y asilo que incluye, entre otras cosas, la reubicación forzosa de solicitantes de asilo en países miembros de la Unión o, en su defecto, del pago de compensaciones económicas para no hacerlo.
En febrero, Donald Tusk aseguró que «la brutal realidad es que la supervivencia de la civilización occidental depende de evitar la migración descontrolada» y enfatizó que Polonia «no aceptará ni a un solo migrante» reubicado en base al pacto europeo.
Por su parte, el ministro polaco de Interior, Marcin Kierwiński, criticó la política migratoria de Bruselas y dijo que «no consigue el equilibrio apropiado entre responsabilidad y solidaridad» y añadió que «crea una disputa entre la jurisdicción de las instituciones de la Unión Europea y la de los Estados miembros».