El tamaño de los centros concertados en Madrid, clave a la hora de cobrar cuotas al alumno

El colegio concertado Santa María La Blanca, en el barrio madrileño de Montecarmelo. EFE/ Rodrigo Jiménez

Madrid, 24 abr (EFE).- Los centros de educación concertados en la Comunidad de Madrid tienen, en general, una financiación ligeramente superior a la media nacional y el tamaño del centro es una variable clave a la hora de que estos colegios cobren cuotas a su alumnado.

Así lo recoge un estudio del Centro de Políticas Económicas de Esade (EsadeEcPol) divulgado este miércoles, que señala que en el caso de los centros con más de 500 alumnos el cobro de cuotas es prácticamente unánime tanto en Primaria (96%) como en la ESO (93%).

Este estudio es la primera «gran radiografía del sector de pago y cobro de cuotas de la escuela concertada en España», y refleja cómo las de Cataluña, Madrid y País Vasco son las tres comunidades autónomas que concentran el 70 % del total de cuotas que pagan las familias con alumnos en centros concertados.

Con respecto a Madrid, el estudio dice que «hay una relación muy fuerte entre el cobro de cuotas y el resultado económico (los centros mejor financiados tienen una mayor probabilidad de cobrar y de que las cantidades sean altas) y una enorme importancia del tamaño de centro para entender las dinámicas de cobro de cuotas».

Madrid, afirma el estudio, es una de las regiones con una mayor brecha entre el porcentaje de centros que cobran cuotas (55 %-60 %, dependiendo de la etapa) y el porcentaje de alumnos que pagan, que ronda el 90 %.

Para entender esta brecha hay que tener en cuenta que si a nivel estatal los centros concertados de más de 500 alumnos representan un 6 % en Primaria y un 2,3 % en la ESO, en Madrid tienen un peso mucho mayor, de un 16 % y un 8 % respectivamente.

«Es precisamente este enorme peso de los centros concertados más grandes sobre el alumnado, combinado con las altísimas tasas de cobro de cuotas entre estos centros (…) lo que ayuda a explicar por qué la brecha entre ambos porcentajes es particularmente grande en Madrid», agrega.

Según el estudio, la Comunidad de Madrid muestra una ligera infra-representación en los tramos bajos y medios de financiación, que rondan el 27%-28% dependiendo de la etapa educativa, respecto al 33 % que representan a nivel nacional, mientras que hay una «sobre-representación» de los centros concertados de Madrid entre el tercio de centros concertados mejor financiados a nivel nacional, un 42%-44% dependiendo de la etapa educativa.

El estudio de EsadeEcPol -con base en «microdatos» del Instituto Nacional de Estadística- dice que los centros concertados con mejor financiación, que representan casi el 45 % de los concertados de la Comunidad de Madrid, cobran cuotas significativas (entre 460 y 560 euros por alumno dependiendo de la etapa), «pese a que su resultado económico medio cubre, con creces, sus gastos no concertados».

Los centros con niveles de financiación intermedios «están en una situación más complicada» -dice el informe-, puesto que sus gastos no concertados medios (430 euros por alumno) superan ligeramente a su resultado económico medio (330-360 euros por alumno), una diferencia que ajustan con un modesto cobro de cuotas de alrededor de 250 euros por alumno.

En cuanto a los centros de menor financiación, «que suponen un porcentaje no despreciable sobre el total» (28 %), afrontan un resultado económico particularmente negativo, especialmente en Primaria y la ESO, con un resultado negativo de entre -500 y -600 euros por alumno, al que suman unos gastos no concertados medios inusualmente elevados que rondan los 450 euros por alumno en las tres etapas, lo que hace que la cuota media cobrada (de unos 200 euros por alumno) apenas cubra una fracción de ambos.

Según los datos a nivel nacional, mientras que un 67 % del alumnado acude a centros de titularidad pública, cerca de un 30 % lo hace en concertados y solo un 4 % acude a privados auto-financiados.

También dice el informe que la escuela concertada cumple con el mandato constitucional de «la libertad de enseñanza», aunque no con el mandato del derecho a la educación, pues «a día de hoy no hay gratuidad universal para acceder a la escuela concertada».

«Además -dice-, la concertada, en comparación con la pública, escolariza en una proporción mucho menor al alumnado de renta baja y origen migrante, lo cual daña significativamente la igualdad de oportunidades y la equidad, uno de sus objetivos fundamentales».

El informe del Centro de Políticas Económicas de Esade  (https://www.esade.edu/ecpol/es/publicaciones)  afirma que «abrir la caja negra» de la escuela concertada en España es necesario «para conocer la magnitud de esta desigualdad y planificar las acciones necesarias para corregirla».