São Paulo, 10 may (EFE).- Porto Alegre, fuertemente afectada por las graves inundaciones en el sur de Brasil, que han dejado al menos 108 muertos, 134 desaparecidos y cientos de miles de desplazados, montará un albergue exclusivo para mujeres y niños tras varios casos de agresión sexual en refugios de la región.
Sebastião Melo, alcalde de Porto Alegre, capital del estado de Rio Grande do Sul, informó la noche del jueves en una rueda de prensa que la estructura será instalada este fin de semana en el Tribunal Regional de Partenon, con el apoyo de entidades del Poder Judicial.
Asimismo, anunció que contratarán «servicios de vigilancia privada» para 127 de los 140 locales que actualmente acogen a 13.100 vecinos que se han visto obligadas a abandonar sus hogares ante el histórico temporal que aún castiga a Rio Grande do Sul.
«Entendemos que las personas necesitan sentirse seguras en este momento de fragilidad», afirmó Leticia Batistella, responsable de los albergues de la ciudad, donde aún hoy, más de una semana después del terrible aguacero, hay barrios enteros inundados.
El anuncio se produce después de que la Policía detuviera a seis sospechosos de cometer delitos de violencia sexual en algunos albergues de la región que dan asistencia a las víctimas del desastre.
En uno de los casos se investiga la agresión a un menor en el municipio de Viamão, de acuerdo con las autoridades brasileñas.
El gobernador de Rio Grande do Sul, Eduardo Leite, señaló además que hay casos en los que presuntamente están implicados parientes de las víctimas, lo que, a su juicio, «indica la posibilidad de que esos abusos ya ocurrían anteriormente».
Rio Grande do Sul, fronterizo con Uruguay y Argentina, aún lidia con los catastróficos efectos de las lluvias torrenciales de la última semana, que han anegado ciudades enteras y afectado a la gran mayoría de los municipios de esta próspera región agropecuaria.
Según el último balance de la Defensa Civil, se han registrado 107 muertos, a los que hay que sumar otro más en el vecino estado de Santa Catarina.
El número total de damnificados es de 1,7 millones en Rio Grande do Sul, donde también se reportaron casi 800 heridos hasta la fecha, mientras los equipos de salvamento se esfuerzan para evacuar a los habitantes que aún están incomunicados por el elevado nivel del agua.
Para este viernes se esperan nuevos temporales de lluvias y rachas fuertes de viento que podrían complicar todavía más las labores de rescate.