El secretario general del PSOE-M, José Manuel Franco, ha dimitido de su cargo tras la debacle de las elecciones autonómicas del 4 de mayo en la Comunidad de Madrid, y una gestora dirigirá el partido hasta la celebración del Congreso Regional previsto a finales de año, han informado a Efe fuentes socialistas este jueves
El secretario general del PSOE-M, José Manuel Franco, ha dimitido de su cargo tras la debacle de las elecciones autonómicas del 4 de mayo en la Comunidad de Madrid, y una gestora dirigirá el partido hasta la celebración del Congreso Regional previsto a finales de año, han informado a Efe fuentes socialistas este jueves.
En estas elecciones el PSOE obtuvo el peor resultado de su historia: perdió 13 escaños al pasar de 37 a 24 y quedó como segunda fuerza tras el PP y Más Madrid, que lo adelantó en votos.
La dimisión de Franco tiene lugar el mismo día que se reúne la Ejecutiva Federal del PSOE y un día después de la reunión de la Ejecutiva Regional, que reconoció los malos resultados electorales pero no se planteó cambios orgánicos ni el relevo como portavoz socialista en la Asamblea de Madrid de Ángel Gabilondo, que fue el candidato en los comicios autonómicos.
Sin embargo, en la reunión telemática de la Ejecutiva Regional, de alrededor de tres horas de duración, algunos miembros pidieron la celebración de un Congreso Regional extraordinario y el reemplazo de Gabilondo.
Franco expresó su intención de cumplir con los plazos y celebrar el Congreso Regional después del Federal de octubre, como estaba previsto.
Ahora, con su dimisión se mantiene la celebración del Congreso Regional antes de fin de año, pero hasta ese momento estará al frente del PSOE de Madrid una gestora, según han informado a Efe fuentes socialistas.
Precisamente, el miércoles la corriente crítica Izquierda Socialista de Madrid pidió la dimisión de la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE, la designación de una gestora y la renuncia al acta de diputado de Gabilondo para iniciar «un proceso de renovación de cargos y políticas».
Respecto al futuro de Gabilondo, fuentes próximas al candidato han aseverado que recogerá su acta como diputado en la Asamblea regional y no se plantea su dimisión, pese a que algunas voces de la dirección socialista estaban dando por segura su salida en la jornada postelectoral.
A la expectativa de lo que dé de sí la Ejecutiva Federal del PSOE de este jueves, entre las filas del socialismo madrileño ha cundido el malestar hacia Moncloa y Ferraz por su injerencia en la campaña, tanto en la configuración de las listas electorales como en el diseño de la estrategia.
Las distintas fuentes socialistas consultadas por Efe ofrecen opiniones distintas respecto al papel que debe asumir Gabilondo y sobre cómo afrontar esta crisis a nivel interno, pero todas coinciden en algo: el enfado ante el rol decisivo que ha desempeñado la cúpula del PSOE durante todo el proceso electoral.
«A veces se confunde el apoyo con la sumisión», declara a Efe uno de los diputados que ha perdido su escaño en la Asamblea, que opina que el PSOE-M, dentro de la «lealtad» a la Ejecutiva Federal, «debería ser más firme» en la defensa de sus posturas.
Otro ya exparlamentario en la misma situación coincide en que «Moncloa se ha excedido en intervenir los procesos», «imponiendo sus criterios» y «teledirigiendo» una campaña en la que ha faltado «pisar la calle».
Este dirigente es de los que opina que «no tiene sentido» la continuidad de Gabilondo como diputado y asegura estar «sorprendido» de que se haya mostrado dispuesto a coger el acta.
Otra fuente consultada indica que hay «malestar» hacia las altas esferas del partido, pero opina en cambio que Gabilondo debería recoger el acta por «coherencia» con el compromiso adoptado ante sus votantes.
Fuente: © EFE 2021