Javier Herrero
Madrid, 11 oct (EFE).- Gloria Gaynor regresa este sábado a España, «un país que le ha dado más momentos especiales que ningún otro», para estrenar una nueva canción y compartir el dulce momento que atraviesa a sus 81 años, lleno de proyectos para 2025 tras ganar un segundo Grammy con un álbum en el que nadie creía.
«Me siento muy motivada. Creo que lo que me mantiene joven es que no paso mucho tiempo con gente de mi edad. Es más, creo que no tengo ni un amigo de mi edad, todos tienen como 20 años menos», reconoce entre risas la emblemática cantante de 'I Will Survive' en una entrevista con EFE.
Este sábado cantará en el Wizink Center de Madrid ocho años después de su última actuación en la ciudad, un lapso en que publicó con gran éxito 'Testimony' (2019), Grammy al mejor álbum de góspel, un género que ya en los años 70 quiso cultivar.
«Mi exmarido, que por aquel entonces era mi mánager, no paraba de decir que esperara a conseguir el Grammy y que entonces podría hacer ese disco. Y, como muchas veces, digo: 'Dios quiso que al final no lograra ese Grammy hasta que hice el disco'», rememora.
No fue fácil. «No hacían más que desanimarme, de discográfica en discográfica, y al final decidí que lo lanzaría por mi cuenta», cuenta sobre un largo proceso de 7 años, no exento de milagros.
«El mismo día que firmaba los papeles para hacerme cargo del lanzamiento, me llamaron de mi compañía editorial, que no firmara, que había alguien esperando para conocerme. Así fue como cerré el acuerdo con Spring House Productions y aquí estoy, con mi segundo Grammy», cuenta orgullosa.
Un nuevo tema en Madrid.
Este sábado el público español podrá escuchar en exclusiva un tema inédito, 'Reaching for the Gold', que formará parte del EP que lanzará en 2025 y para el que ha trabajado con autores que escribieron «hits» para artistas como Miley Cyrus, Taylor Swift, Meghan Trainor o Dolly Parton, entre otros.
«No será un disco de góspel, pero sí tendrá esa parte inspiradora, en la línea de toda mi carrera de motivar a la gente», dice.
De hecho, si existe una canción esperanzadora por antonomasia, esa es 'I Will Survive', que su compañía quería lanzar como «cara B» de otro corte, pero que Gaynor rescató para darle mayor relevancia como parte de su sexto álbum, 'Love Tracks' (1978).
«Es mi canción favorita de mi repertorio porque sé que va a ayudarme a cumplir mi primer objetivo en cualquier concierto: darle al público algo que permanecerá incluso cuando acabe el concierto», explica sobre este éxito que le dio su primer Grammy.
Frente a Donna Summer, quien se arrepintió de haber grabado temas como 'Love To Love You Baby' por ir en contra de sus principios religiosos, Gaynor no ve problemas para conciliar su profunda fe y su condición de icono de la comunidad LGTBI gracias sobre todo a esa canción. «Dios me quiere, ¿por qué habría de estar en contra de nadie que a mí me quiera?», argumenta.
Su legado como mujer fuerte.
'I Will Survive' fue además una de las primeras ocasiones en la historia de la música en que una mujer exhibía su fortaleza después de una ruptura amorosa, un rasgo que aprecia en 'hits' recientes «como 'Flowers' de Miley Cyrus». «Sí, las mujeres somos poderosas y no nos moriremos por no tener a un hombre a nuestro lado», suscribe.
Basta preguntarle si considera esa idea parte de su legado, para que responda con contundencia: «Sí, absolutamente. Es una parte muy importante de mi legado», señala.
En esa línea, arma una cerrada defensa de la música disco frente a quienes acusaron a este estilo de ser un vehículo de evasión, falto de compromiso social: «Es la única música en la historia que ha juntado a gente de distinta raza, credo, color, nacionalidad o grupo de edad».
Fue su compromiso social lo que la llevó hace 10 años a estudiar Psicología. «Lo más duro era hacer los deberes. A menudo me veía en el lobby de hoteles de diferentes países, haciendo las tareas en mitad de la noche porque no había internet en las habitaciones», rememora con humor.
Lo hizo para fundar una organización que concienciara a padres jóvenes que se habían ausentado de sus hogares sobre la importancia de que participaran en las vidas de sus hijos.
«Mis hermanos y yo nos criamos sin padre, así que conozco el daño que te hace psicológicamente y te persigue para siempre», comenta Gaynor, que al final prefirió ayudar económicamente a una organización ya creada: «Como mujer, desde esa posición, no me verían más que como una pelma o la madre de sus hijos».
Buena parte de todo ello podrá verse en el 'biopic' sobre su vida que se estrenará también el próximo año, un material que asegura que sorprenderá por los detalles íntimos de sus «luchas» profesionales y personales.