Madrid, 14 dic (EFE).- Estrellas del cine y la televisión en España han dado calor este sábado a los premios Forqué, que abren la temporada grande de los premios cinematográficos en un Madrid gélido. Brillos en los vestidos y en los trajes, atrevimiento y contención, el negro y el blanco han lucido en la alfombra roja previa a la gala.
A partir de las 19.00 horas comenzaron a circular algunas celebridades por el palacio municipal de congresos, en el recinto ferial IFEMA de Madrid, en donde el frío ya comenzaba su acecho. En el exterior se esperan temperaturas un poco por encima de los 0 grados, con posibilidad de ponerse incluso con el signo negativo delante.
La entrega de premios de este sábado, la de los Forqué, es importante no sólo porque da comienzo a una temporada de reconocimientos que culminará en febrero con los Goya, en Granada, cuyas nominaciones finales se darán a conocer el próximo miércoles.
También es importante porque las películas y las series que ganen aquí suelen tomar ventaja en la particular carrera de los largometrajes y series que aspiran a ser los y las mejores del año.
Pero antes, una escenografía concreta y apuestas distintas, las de la alfombra roja.
A tenor de la vista este sábado en los Forqué, entre los hombres van ganando posiciones las americanas cruzadas.
Se resisten a ceder, si es que ceden, los cortes clásicos. Ahí estuvo Mario Casas con un traje gris más ceñido, o Asier Etxeandía, vestido este sábado con uno verde oscuro.
Entre lo clásico puede haber niveles de atrevimiento. Óscar Jaenada lució traje rojo con pañuelo de verde cálido, mientras que el también actor Marc Clotet dejó ver una camisa de transparencias y Juan Betancourt, retazos de brillos en su atuendo oscuro.
En el vestuario femenino ha vencido el negro, como es habitual, pero sin dejar de lado la lentejuela y la pedrería. Más clásicas han sido Hiba Abouk, Carmen Machi, Marta Hazas o Elena Furiase, y más osada la actriz Carolina Yuste, una de las favoritas en los Forqué por su trabajo en ‘La infiltrada’, con un look en el que reinaba el cuero.
Hay actores que sobresalen en la sobriedad, como Antonio de la Torre, con sombrero, igual que el cineasta Pablo Berger, además calzado con unas botas deportivas de lo más coloridas. O Eduard Fernández con su fular, o Javier Gutiérrez, de azul oscuro.
Quienes han apostado por el blanco han brillado especialmente, como la influencer Dulceida, la modelo y empresaria Jessica Goicoechea y la actriz Mina El Hammani.
No ha faltado el esmoquin, no puede hacerlo en una ocasión así, y ejemplo de ello ha sido Juanjo Puigcorbé, o el ministro de Transformación Digital, Óscar López, o el presidente de EGEDA, la entidad organizadora de los premios, Enrique Cerezo.
Como autoridades han asistido, además, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; la ministra de Sanidad, Mónica García; y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida.
En definitiva, una alfombra roja de lo más variado en todos los sentidos, en la que han brillado también las influencer Marta Díaz o Violeta Magriñán.
Aunque si entre las personalidades cinematográficas ha sorprendido alguien, ese alguien ha sido Najwa Nimri con su vestido de estampados azules y blancos, y partes de pedrería. Puede ser una de las triunfadoras este sábado si gana la Mejor Interpretación Femenina por su trabajo en ‘La virgen roja’.
