El alcalde apunta a las medidas e inversiones que Emasesa está llevando a cabo para combatir la sequía
El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha asistido a la jornada internacional ‘Una visión integradora de la sequía y el cambio climático’, organizada por Emasesa. En el acto ha instado a los ciudadanos sevillanos a reducir el consumo de agua para combatir la sequía.
Antonio Muñoz ha expresado su preocupación “Sevilla es un territorio vulnerable desde el punto de vista del cambio climático. Actualmente contamos con unas existencias de agua de 252 hm3. Seguimos bajando y estamos muy por debajo de los 268 hm3 que marca el umbral para el estado de alerta. Para que nos hagamos una idea las recientes lluvias sólo han supuesto una aportación de 0,6 hm3, lo que equivale prácticamente a 1 día de consumo”.
Asimismo, el alcalde ha instado a los sevillanos a “seguir reduciendo el consumo de agua para llegar al objetivo que nos hemos marcado de 90 litros por persona y día. En los últimos meses hemos reducido el consumo en un 2,6% gracias a las campañas de concienciación y sensibilización que Emasesa viene realizando, pero seguimos en los 112,5 litros por persona y día. Lo fundamental y prioritario ahora mismo es ahorrar agua”.
Las inversiones que ha realizado Emasesa son imprescindibles para Sevilla
Por otro lado, Muñoz ha destacado que “la experiencia previa que Sevilla tiene en este tipo de situaciones ha supuesto que Emasesa en los últimos años haya ejecutado inversiones que ahora son imprescindibles como Melonares o como una red de infraestructuras adaptada ante esta situación”. En este sentido, el alcalde ha apuntado a que “Emasesa sigue llevando a cabo medidas e inversiones para afrontar las situaciones que se puedan producir en los próximos meses especialmente si en este año hidrológico las lluvias no llegan”.
Entre estas medidas de Emasesa destaca la adaptación de la planta de tratamiento de agua potable EDAR Carambolo. El objetivo de esta es garantizar un mejor tratamiento del agua, así como la calidad de esta, en el caso de que el nivel de los embalses siga disminuyendo. La inversión para esta adaptación es de 2 millones de euros.