La nueva normativa busca reducir el impacto de los residuos y fomentar un sistema productivo y de consumo más sostenible, todo en línea con las directrices de la Unión Europea

La Asamblea autonómica de la Comunidad de Madrid ha aprobado la Ley de Economía Circular, una legislación destinada a mejorar la eficiencia en el uso de recursos naturales y reducir el impacto de los residuos. La normativa, que entrará en vigor una vez se publique en el Boletín Oficial regional, busca promover un sistema productivo y de consumo más sostenible.

La nueva Ley de Economía Circular establece un cambio de paradigma, pasando de un modelo lineal a uno de reutilización y reciclaje, con el objetivo de maximizar el ciclo de vida de los materiales y prevenir la generación de residuos. Además, aspira a avanzar hacia el vertido cero e incentivar la creación de nuevas oportunidades para empresas y municipios.

Se trata de una normativa que, lejos de imponer cargas adicionales, busca incentivar la colaboración y el compromiso de toda la sociedad. No establece tasas ni impuestos adicionales y se centra en generar beneficios ambientales, económicos, sociales y académicos. Asimismo, busca reforzar la seguridad jurídica, eliminar la hiperregulación y promover la sostenibilidad y la creación de empleo.

La Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, impulsora de esta legislación, pretende involucrar a toda la sociedad en un uso responsable de los recursos naturales y en el fomento de la reutilización y el reciclaje de productos. En apoyo a los municipios y mancomunidades, el Gobierno regional financiará el 50% del coste de la construcción de instalaciones de tratamiento de desechos más grandes y modernas, respondiendo así a las exigencias de la Unión Europea. Además, se otorgará mayor flexibilidad a las localidades para adaptar el reglamento a su realidad, definiendo el mínimo de puntos limpios por localidad y unidades móviles.

La próxima Estrategia de Economía Circular 2025/32, que se desarrollará en los próximos años, avanzará en la transformación hacia un modelo de tratamiento de residuos más eficiente en la región.