Aragonès reunirá mañana al Govern para dar los primeros pasos sobre los pactos con el PSOE

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, a su llegada al hemiciclo del Parlament donde este miércoles se somete a la primera sesión de control tras la investidura de Pedro Sánchez y después de haber ofrecido a JxCat y CUP que entren a formar parte de la mesa de negociación con el Estado para sumar fuerzas para lograr el referéndum. EFE/Toni Albir

Barcelona, 22 nov (EFE).- El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha anunciado que mañana jueves convocará una reunión extraordinaria del Consejo Ejecutivo del Govern para dar los primeros pasos y «concreciones» con relación a los acuerdos con el PSOE, que considera que abren una «nueva etapa» en su mandato.

Así lo ha asegurado durante la sesión de control en el pleno del Parlamento de Cataluña. «Ya estamos en una nueva etapa. Mañana tomaremos las primeras decisiones para el desarrollo para unos acuerdos que son buenos para la ciudadanía», ha señalado el mandatario, cuando respondía al republicano Josep Maria Jové.

Según han explicado fuentes de la Generalitat, esa reunión extraordinaria del Govern será a las 15:30 horas y, posteriormente, sobre las 17:00 horas, el presidente comparecerá ante los medios.

Aragonès realizará un diagnóstico de la situación y, en consecuencia, tomará mañana diversas decisiones y realizará «encargos concretos» a sus consellers en relación con diversos ámbitos de esos acuerdos de ERC con los socialistas.

Entre esas carpetas, apuntan esas fuentes, estarán mañana Rodalies y el probable nombramiento de un comisionado para su traspaso; la quita de la deuda autonómica acordada con el PSOE y el objetivo ahora de ERC de lograr una financiación «singular» para Cataluña en 2024; o la aceleración de la negociación con el Estado para intentar pactar un referéndum de autodeterminación.

«Nueva etapa» que requiere «política grande»

El dirigente, agregan desde la Plaza Sant Jaume, es consciente de que el escenario ha cambiado tras la investidura de Sánchez, no solo en las relaciones con la Moncloa, sino también por la aprobación de la amnistía, la «coincidencia estratégica» con Junts en la negociación y la fuerza que ambos partidos ejercerán en el Congreso.

«Ya estamos en una nueva etapa, se vea o no se vea. Los que habían rechazado la amnistía hasta hace poco, hoy la tramitan en el Congreso. Los que consideraban que la vía de la negociación no se tenía que intentar, hoy apuestan por ella», ha sugerido, en alusión a los socialistas y a Junts, respectivamente.

Pero Aragonès ha advertido de que ERC no quiere afrontar esa nueva etapa en soledad, sino que lo quiere hacer «acompañado de una amplia mayoría parlamentaria, con el objetivo de que Cataluña pueda decidir libremente en un referéndum» acordado.

Críticas desde Junts y la CUP

Pero Junts, que ya había sido muy crítico durante su intervención en el hemiciclo, ha tardado apenas minutos en censurar el anuncio del president: «Aragonès evita debatir sobre Rodalies en el Parlament y explicar su acuerdo sobre esta materia, pero en cambio convoca una reunión extraordinaria del Govern para abordar esta cuestión. ¿Dónde queda el respeto al Parlament», ha afeado a través de la red social X la portavoz de Junts, Mònica Sales.

El guante que Aragonès lanzó esta semana a Junts y la CUP para unir fuerzas en la mesa de negociación con el Estado tampoco lo han recogido los anticapitalistas, que han pedido al president «abandonar su sumisión al Estado», como demuestra un pacto con el PSOE que supone la «renuncia de facto a la autodeterminación».