El Gobierno de la Comunidad de Madrid no tiene previsto incorporar en esta legislatura, dentro del plan normativo, el concepto de autodeterminación de género, incluido en la Ley de Protección Integral contra la LGTBIfobia y discriminación por razón de orientación sexual del año 2016.
La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, lo ha indicado en la sesión de control de la Asamblea en respuesta a una pregunta de la portavoz de Vox, Rocío Monasterio.
«El delirio de género obsesiona al Gobierno social-comunista, donde tenemos a nuestra querida ministra de Igualdad, Irene Montero, obsesionada con la determinación de género, la misma que aprobaron ustedes aquí, en una ley en el año 2016, señores del PP», ha señalado Monasterio.
«Fíjense qué barbaridad han aprobado para que le llame la atención a la vicepresidenta tercera del Gobierno, Carmen Calvo, que dice que el concepto de autodeterminación de género sin más que la mera voluntad o el deseo puede poner en riesgo los criterios de identidad de 47 millones de españoles», ha indicado la portavoz de Vox.
Monasterio ha resaltado que no le queda claro dónde está el PP y se ha preguntado si está «en defender la categoría de sexo, en defender la identidad de la mujer o está en el borrado de nuestra sexualidad y poniendo la autodeterminación de género».
Por ello, ha preguntado si el Gobierno regional va a seguir con el plan normativo en el avance de las leyes que aprobaron en el año 2016 sobre la autodeterminación de género, al tiempo que les ha pedido que se aclaren, les ha aconsejado que se alejen de la ideología de género y les ha pedido que el 8 de marzo se acuerden de no hablar en su nombre.
Diez comunidades autónomas de distintos signos políticos, entre ellas Madrid, contemplan ya en sus legislaciones autonómicas la autodeterminación de género como un derecho para las personas trans, un aspecto que el Ministerio de Igualdad quiere incorporar en la ley al permitir el cambio de sexo en el registro sin necesidad de informe ni tratamiento médico a partir de los 16 años.
La autodeterminación de género, que mantiene dividido al movimiento feminista y es objeto también de disputas entre los dos partidos del Gobierno (PSOE y Unidas Podemos), permite el reconocimiento legal del género de una persona sin que un tercero tenga que decretar que padece un trastorno.
En la Comunidad de Madrid, la Ley de Identidad y Expresión de Género e Igualdad Social y no Discriminación -de marzo de 2016- indica que «en ningún caso será requisito acreditar la identidad de género manifestada mediante informe psicológico o médico».
La Ley de Protección Integral contra la LGTBifobia y la Discriminación por Razón de Orientación e Identidad Sexual -de julio de 2016- habla del «sexo autopercibido por cada persona, sin que deba ser acreditado ni determinado mediante informe psicológico o médico, pudiendo corresponder o no con el sexo asignado en el momento del nacimiento».
Fuente: © EFE 2021