En el día de ayer, el público pudo disfrutar en el templete de El Retiro de un repertorio con piezas de los grandes compositores de la historia de la música

El pasado domingo, 23 de mayo, a las 12:00 horas, el público de Madrid volvió a disfrutar de esta cita musical que se repite cada verano. La Banda Sinfónica Municipal de Madrid regresa un año más al templete del parque de El Retiro con su ciclo de verano, que se inicia, como es tradicional, tras la festividad de San Isidro y se celebrará todos los domingos a la misma hora hasta finales de septiembre.

Esta nueva temporada estará marcada aún por las medidas de seguridad establecidas por las autoridades sanitarias, con un formato reducido de músicos y manteniendo la distancia de seguridad entre los asientos de los espectadores.

El concierto de ayer estuvo conducido por el subdirector de la formación, Enrique Tena, y ofreció un repertorio con piezas de algunos de los grandes compositores de la historia de la música.

En la primera parte del programa, el ensamble de clarinetes interpretó la mejor música de Mozart. A continuación, el grupo de saxofones ofreció al público algunos de los títulos más destacados de Manuel de Falla.

En la parte final, saxofones, clarinetes y percusión hicieron un repaso al folclore en la música clásica con títulos como Rapsodia húngara nº2 de Liszt, Danza húngara nº 5 de Brahms, Recuerdos de la Alhambra de Tárrega y Fandango (Doña Francisquita) de Vives, con arreglos de Eloy Gracia.

De la misma manera, ayer se estrenó la reducción del propio autor del pasodoble sinfónico Olé mi torero de Joaquín Anaya y completó el programa el preludio de La Torre del Oro, con la transcripción para este conjunto de Enrique de Tena.