El presidente del PP gaditano, Bruno García, ha expresado su preocupación por la reciente investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno de España
García ha argumentado que este nuevo gobierno supone una amenaza para Cádiz, afirmando que «supone perder en derechos y oportunidades para ganar en desigualdad respecto a otros territorios«. Según García, el gobierno de Sánchez no es solidario con la provincia de Cádiz y va en contra de los gaditanos, la igualdad, los derechos fundamentales y un proyecto común.
En una rueda de prensa respaldado por los diputados nacionales Pedro Gallardo e Ignacio Romaní, García ha alertado sobre la posibilidad de que las inversiones necesarias para la provincia de Cádiz peligren, ya que el gobierno podría priorizar las solicitudes de sus socios en lugar de un reparto equitativo de las inversiones. Ha criticado los acuerdos alcanzados por el PSOE para lograr la investidura, calificándolos como «bastante humillantes para España en su conjunto«.
García también ha cuestionado el papel de los socialistas gaditanos en este contexto, preguntando si serán «un simple delegado de Pedro Sánchez» o darán voz a los socialistas gaditanos que no están de acuerdo con lo que está sucediendo.
Respuesta del PSOE
En respuesta a las declaraciones de Bruno García, José Ramón Ortega, exdiputado en el Congreso y concejal del PSOE en el Ayuntamiento, ha criticado el papel de García como «militante disciplinado» del PP. Ortega ha instado a García a mostrar más preocupación por la ciudad de la que es alcalde que por la política nacional.
Ortega ha señalado el silencio de García respecto a los recortes de la Junta y los repartos desiguales de la Diputación, ambas bajo el control del PP. Además, ha cuestionado la «doble vara de medir» del PP en cuanto a pactos de gobierno, destacando que García ha firmado un pacto con el partido La Línea 100×100, lo que ha ocasionado un reparto desigual de inversiones en la provincia.
El concejal socialista ha instado a García a preocuparse por proyectos paralizados por la Junta en la ciudad y a abordar cuestiones de política nacional como los fondos europeos, medidas sociales y la cohesión social.
Tensión entre ambos bandos
Bruno García ha concluido advirtiendo que estos son el principio de unos años complicados y que el PP peleará contra cada agravio que Pedro Sánchez haga a Cádiz, Andalucía y España. Por su parte, el PSOE ha afeado el papel del PP, señalando la doble vara de medir en los pactos de gobierno y acusando al partido de romper la cohesión social con políticas insolidarias.
El debate político entre el PP y el PSOE en Cádiz refleja las tensiones y divergencias ideológicas en el panorama político nacional, mientras ambas partes defienden sus perspectivas sobre el impacto de la investidura de Pedro Sánchez en la provincia y el país.