Madrid, 18 ago (EFE).- Unas 2.680 millones de hectáreas en toda España están dedicadas a la agricultura ecológica, sin embargo, dos enclaves despuntan en el tejido nacional, Castilla La-Mancha y Las Rozas (Madrid), nominados por la Unión Europea (UE) como referentes en producción ecológica.
La Comisión Europea (CE) organiza cada año los Organic Awards (Premios Orgánicos), unos galardones, de los que el próximo septiembre se conocerán los premiados, para promover el consumo de productos ecológicos y la producción europea de estos alimentos.
Con un 16 % de la superficie ecológica de toda España, Castilla-La Mancha se ha alzado como uno de los nominados en la categoría de Mejor región orgánica, mientras que el municipio de Las Rozas (Madrid) lo ha hecho en la sección de Mejor ciudad orgánica.
En este último caso, el municipio madrileño compite contra otros vecinos europeos como la ciudad de Cascais (Portugal) y BioStadt Bremen (Alemania), mientras que la región castellano-manchega lo hace contra otras zonas de Portugal y Filandia.
Estas dos nominaciones constatan el buen ritmo que mantiene el mercado nacional del ecológico, situado en el top 10 de países con mayor cuota de mercado «bio» y que alcanzó los 3.000 millones de euros en el 2023, según los últimos datos de Ecovalia.
Castilla-La Mancha, potencial ecológico
La viceconsejera de la Política Agraria Común (PAC) y Políticas Agroambientales de Castilla-La Mancha, Gracia Canales, asegura en declaraciones a EFE que «se han puesto muchos recursos en marcha» para conseguir que esta región sea un ejemplo a la hora de hablar de producción ecológica.
Según los datos de Ecovalia, en la actualidad esta zona cuenta con 438.467 hectáreas de superficie ecológica, una cifra significativa ya que, según los registros de la propia autonomía, hace una década la superficie apenas llegaba a las 300.000 hectáreas.
«Hay un gran compromiso por parte de los agricultores y ganaderos», defiende la viceconsejera, a la vez que señala las tres líneas de actuación que ha llevado a cabo en los últimos años este gobierno para dar un empuje al ecológico: Acompañamiento, financiación y promoción.
Por ello, los productores cuentan con una red de 52 oficinas comarcales repartidas por todo el territorio, en las que se ofrece asesoramiento técnico tanto para la conversión de los cultivos al ecológico como para su manteniendo.
Sobre la financiación, Canales resalta el gasto extra que supone para los productores cultivar bajo este tipo de producción, por lo que la administración ha puesto sobre la mesa 160 millones de euros de los fondos europeos y propios para destinar a esta partida.
Además, el gobierno manchego destina 2,3 millones de euros a la promoción de sus productos regionales bajo la Denominación de Origen Protegida (DOP) e Indicación Geográfica Protegida (IGP) Campo y Alma, entre la que también se encuentran este tipo de productos.
A pesar de estos esfuerzos, la viceconsejera reconoce la necesidad de hacer una apuesta aún más fuerte por el fomento de su consumo, pues, aunque la región es una de las principales productoras, su gasto per cápita se sitúa en 40 euros, el más bajo de toda España sólo por detrás de las Islas Canarias.
Las Rozas (Madrid), urbano y sostenible
A diferencia del caso anterior, el municipio de La Rozas ha puesto en marcha políticas ecológicas de acuerdo con las propias características de la zona: muy urbanita, con unos 95.000 habitantes, de los que 20.000 son población joven, y cercano al núcleo urbano de Madrid.
El concejal de Medio Ambiente y Servicios a la Ciudad del Ayuntamiento de Las Rozas, Jaime Santamaría, subraya el esfuerzo que desde 2020 lleva a cabo el consistorio para potenciar el desarrollo medioambiental de la ciudad.
Ejemplo de ello son los Huertos Urbanos de la Finca de la Talaverona, un espacio rehabilitado que aporta 66 huertos urbanos en altura, tres para servicios de educación ambiental y ocho para asociaciones del municipio: «Hemos regenerado el espacio urbano y para ponerlo al servicio de los vecinos» celebra Santamaría.
Mientras que Castilla-La Mancha centra sus esfuerzos a nivel productivo, este municipio pone el foco en la educación, dado que tiene una población muy joven, explica.
En este sentido, destacan a nivel nacional, siendo la red más amplia de Ecoescuelas de España, con 28; se trata de centros educativos que forman parte de un programa internacional promovido por la Fundación para la Educación Ambiental.
Santamaría reconoce que este no es un «pueblo rural agrario» dedicado al cultivo de determinado alimentos, sin embargo y desde sus propias características, como la educación o los huertos urbanos, tratan de transmitir la necesidad de preservar las zonas naturales y llevar a cabo una producción circular y sostenible.