El pasado 27 de septiembre, celebramos el Día Mundial del Turismo
Museos, galerías de arte, restaurantes, cines, edificios históricos, monumentos, plazas… Madrid es una ciudad que ofrece gran cantidad de experiencias. Sin embargo, el mayor encanto de la capital son sus pequeños detalles, que pasan normalmente desapercibidos. Para conmemorar el Día Mundial del Turismo, te traemos cinco secretos de la capital que deberías conocer.
Un mirador secreto con vistas panorámicas
El primero está ubicado en uno de sus puntos más emblemáticos de la ciudad, el Parque de El Retiro. Lo que poca gente conoce es que desde El Retiro se puede disfrutar de un mirador con vistas panorámicas. La Gran Vía o edificios tan importantes como Telefónica, se pueden ver desde las alturas. Este mirador se encuentra justo en la estatua ecuestre del rey Alfonso XII. La entrada es gratuita con el programa de visitas guiadas Pasea Madrid. Eso sí, no hay ascensor y para poder disfrutar de sus vistas hay que subir un total de 97 escalones.
‘De Madrid al cielo’
Ahora bien, diríamos que la frase más representativa de la capital es de ‘Madrid al cielo’, ¿verdad? Aunque la contaminación lumínica no deje disfrutar de las estrellas, hay un punto secreto en Madrid desde el que se puede aprender a “leer el cielo”. Está ubicado en el Parque de La Gavia y se llama ‘El Mirador Estelar’ o ‘Colina del Mirador Estelar’. Diseñado para que cualquier persona, sin ningún tipo de conocimiento en astronomía, pueda identificar las constelaciones.
Los sentidos de Madrid
Allí se encuentra otro secreto de la capital. En el mismo parque, se puede disfrutar de ‘El Bosque de los Sentidos’. Tiene numerosas áreas de diversión, con juegos de instrumentos musicales, tirolinas o toboganes, dirigidas especialmente para los más pequeños.
Un madrileño muy conocido
El cuarto secreto de Madrid es bastante pequeño, pues mide únicamente 15 cm, pero es suficiente para trasladarte a tu infancia. Pocos saben que el Ratoncito Pérez es madrileño y tiene su casa justo al lado del metro. Bajo el bordillo de la estación de Metro de Banco de España, justo enfrente de los Jardines del Palacio de Buenavista, se puede ver la diminuta puerta de entrada a la casa del conocido recolector de dientes.
La primera mujer universitaria
Por último, un secreto que se puede ver en Malasaña. En Madrid, abundan las estatuas que esconden la mejor de las historias. Una de ellas es la de Julia, una estudiante que sujeta unos apuntes y se apoya en el muro del Palacio Bauer, en calle Pez 42. Su autor, el escultor Antonio Santín, quiso homenajear a la primera mujer que, pese a las prohibiciones, se vistió de hombre para poder ir a la universidad en 1848.
Para tener un Día Mundial del Turismo inolvidable, Madrid atesora lugares especiales, por muy pequeños que sean. Lejos de los puntos más emblemáticos, la capital guarda pequeños secretos que se pueden disfrutar paseando por sus calles.
