Madrid, 17 nov (EFE).- Asociaciones ecologistas y ciudadanas han convocado para este domingo concentraciones y «bicifestaciones» en diez ciudades para protestar «contra los retrocesos en movilidad sostenible» registrados tras las elecciones municipales de mayo y reclamar más espacio para peatones y transporte público.
Bajo el lema «Movilidad sostenible. Ni un paso atrás», las protestas se llevarán a cabo en Bilbao, Castellón, Elche, Logroño, Madrid, Gijón, Málaga, Valladolid, Sigüenza y Coslada, con el apoyo de decenas de organizaciones ecologistas, ciclistas, de viandantes y vecinales, han explicado en rueda de prensa los convocantes.
Las organizaciones han pedido por carta a las ministras en funciones de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y Transportes, Raquel Sánchez, y la presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), María José García-Pelayo, que se impliquen para frenar los retrocesos.
«Casos como los de Barcelona, Valladolid, Elche, Logroño, Málaga, Palma, Gijón, Castellón o Valencia se han convertido en puntos negros en el proceso hacia una movilidad sostenible, activa, segura y sin humos en las ciudades. Se están produciendo retrocesos inadmisibles como el desmantelamiento de carriles bici, áreas peatonales o Zonas de Bajas Emisiones (ZBE)», denuncian en un manifiesto.
Estas acciones, advierten, ponen en peligro la salud de las personas, son un retroceso en la reducción de emisiones e, incluso, pueden suponer que muchos ayuntamientos deban devolver los millones de fondos europeos que les fueron asignados para poner en marcha medidas para la descarbonización del transporte urbano y la mejora de la movilidad sostenible.
Como ejemplos, el desmantelamiento de carriles bici en Elche y Logroño, la eliminación de carriles bus y bici en Valladolid, la amenaza de eliminación de la ZBE de Castellón, el anuncio de ciudades como Gijón o Barcelona de que reducirán al mínimo las ZBE, la eliminación de restricciones de tráfico en Murcia o la desprotección de zonas escolares en Gijón o Madrid.
En el manifiesto, las organizaciones instan a los equipos de gobierno municipales a reconsiderar sus posiciones y les recuerdan que mientras no existe un derecho a circular en moto, sí existen el derecho a la salud y el derecho a un medio ambiente limpio.